De la familia que no pedimos

Capítulo 9: Una mañana a solas

Buddie Daddies no me pertenece es propiedad de sus respectivos autores la historia es de mi autoría.

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- ¿Dónde están papá Rei y papá Kazuki? -Preguntó Miri mientras dibujaba en un par de hojas en la barra de la cafetería, su tío Kyu la había recogido aquella mañana y había dicho que pasarían el día juntos mientras sus papás arreglaban algo, aunque no había dicho que.

-Tienen un trabajo importante que hacer, volverán por la tarde. -Respondió el castaño dejando una rebanada de pastel frente a la menor agradeciendo que la menor no se hubiera dado cuenta de la tensión que había entre Rei y Kazuki por aquellos días. - "Mas vale que esos dos arreglen lo que sea que este pasando".

Generalmente Kyutaro no se involucraba en los problemas personales de las personas con las que trabajaba, no le interesaba y no era necesario para su trabajo.

Pero había sido necesario intervenir al notar la falta de coordinación que parecía haber entre Kazuki y Rei la cual parecía provenir de lo que le gustaba llamar "una pelea de pareja", hubiera dejado que la situación siguiera y eventualmente se resolviera, si no fuera por que sabía que dejar que continuaran así podría hacer que los mataran por no estar atentos.

Así que había decidido ir a recoger a Miri y decirles amablemente (es decir amenazarlos) a Kazuki y Rei que no aparecieran en el café hasta que resolvieran sus problemas.

La mirada ligeramente avergonzada de Kazuki y el gesto de extrañeza de Rei le indicaban que ni siquiera habían pensado en hablar entre ellos para saber que era lo que pasaba, Kyutaro se prometió que la siguiente vez que pasara algo como eso los mandaría a terapia de pareja.

Por un momento Kyutaro recordó que ellos no eran realmente una pareja, aunque si lo pensaba bien...

- "Creo que podría pedir un aumento". -Pensó él hombre mientras prepara un poco de café.

Mientras con Rei y Kazuki

El ambiente en el departamento había sido pesado desde que Kyutaro se fue con Miri, al menos eso quería pensar Kazuki, aunque sabía que había sido así desde hace unos días después de pensar en cómo se sentía sobre su amistad con Rei.

Kazuki había decidido alejarse un poco de Rei en un intento de mantener sus sentimientos a raya hasta que dejara de sentirse como se sentía... lo cual no había funcionado en realidad y solo había hecho que él pelinegro respondiera de la misma manera después de sus primeros intentos de saber lo que pasaba.

Al menos, para alivio del rubio, Miri no había hecho preguntas ni parecía haberse dado cuenta de que algo pasaba y ellos siguieron cumpliendo con cuidar de la castaña como si no ocurriera nada, aunque Kazuki extrañaba la calidez que había estado en el departamento hasta ese momento y para si esperaba que él azabache también lo echara de menos.

- "¿Qué se supone que debemos hacer ahora?". -Se preguntó el rubio mientras lavaba los platos del desayuno intentando hacer tiempo para pensar en que diría cuando hablara con Rei, la visita de Kyutaro esa mañana lo había tomado con la guardia baja por lo que no estaba muy seguro de cómo debía actuar.

-Los platos ya están limpios. -Comento Rei atrás de él sobresaltándolo y logrando que casi soltara el plato por la sorpresa.

- ¡Rei, casi me haces romper el plato! -Exclamo él rubio dejando el plato aun lado para que se secara antes de que pasara algo más.

-Siempre podemos comprar más. -Respondió Rei con tranquilidad antes de alejarse para recargarse en la barra de la cocina. -Has estado lavando los platos desde hace 20 minutos, no puedes seguir así hasta que tengamos que recoger a Miri.