capítulo 4

1.7K 176 2
                                        

—no me canso de verte en esa forma— dijo el alfa al entrar a la habitación.

Ahí se encontraba Tony recostado al espaldar, con su pequeño hijo en brazos, dándole pecho.

—siempre dices eso Hydra— río un poco al verlo subir a la cama y sentarse muy pegado a él.

—solo por estos pocos meses te permitiré alimentarte de ahí pequeño, ese pecho me pertenece a mi cachorro— pincho la mejilla de su hijo con su dedo.

—otra vez Hydra, peleando por eso, deja que Peter coma tranquilo, mira que se pone de mal humor, igual que tu—peinó con su mano los cabellos castaños de sus hijo.

—por lo menos en eso nos parecemos, por que en físico es identico a ti, y estoy agradecido por eso, no sabría como tomarme que otro rubio te robará de mi lado— el omega no pudo evitar reír ante eso.

—tal vez el próximo sea igual a ti, ¿no crees que existe esa posibilidad?—

El alfa volteo a verlo directo a los ojos, sorprendido por lo dicho por el omega.

—¿Quieres tener más hijos conmigo?—

—claro, eres mi alfa después de todo, ¿no el algo normal eso?—

—bueno, Peter fue un accidente no planeado, eso es un hecho obvió cariño, pero no por eso lo quiero menos, pero pensé que no querrías más hijos—

—pues pensaste mal alfa, nunca des nada por hecho conmigo—

—eso veo— se acerco mas al omega y comenzó a besar su cuello.

—Tranquilo alfa, aun no podemos, di a luz hace una semana, tendrás que aguantarte hasta dentro de varios meses— le sonrío con malicia al alfa al escuchar el gruñido de molestia —o te haces justicia por tu propia mano— soltó una carcajada al ver la cara de ofendido del alfa.

Y asi paso un mes sin mucho cambios, solo ver a su pequeño crecer lentamente, Hydra seguía peleando de manera infantil, y eso siempre le causaba gracia al castaño, su vida era perfecta en todo los sentidos, tenía una familia, un hijo adorable, un alfa completamente devoto a él, que lo protegía y lo mimaba con mucho cariño como el siempre espero.

Hydra le contó del encuentro con sus antiguos compañeros, se inquieto un poco al saber que aún estaban en el mismo universo, pero sabía que no podrían llegar a él, o eso pensaba.

Un día normal, Tony estaba cambiando el pañal de si cachorro cuando de pronto.

—bien, ya estas listo... y dormido— rió —eres muy dormilón cachorro— acaricio las mejillas regordeta de su pequeño, de pronto escucho ruido extraño, se asusto al ver que por la ventilación salía humo de color verde, eso lo puso sobre alerta —¿que demonios es esto?— Tomó a su hijo en brazos y comenzó se encerró en el cuarto de baño, por el aroma del gas sabía que era para ponerlo a dormir —encerrados aquí podremos darle tiempo a tu padre de encontrarnos—

Después de un rato la puerta de baño se a abrió, dentro del el se podía ver a Tony y a su cachorro dormidos.

—volveremos a casa Tony, a donde perteneces—

Portal HydraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora