Una noche durante la batalla de los reinos. Me encontre con James, el líder de las tropas del reino sol, decidido a defender a su reino y protegerlo a toda costa, hijo de lord Halifax y heredero al trono. Un hombre fuerte con cabellos dorados como los rayos del sol y su belleza seductora.
A pesar de ser de dos reinos completamente diferentes, no pudimos evitar experimentar una sensación de atracción, entre nosotros se había creado una tensión que ninguno podia ignorar, pero la guerra nos separó y no fueron capaces de decir ni una palabra para saber quienes eran.
Por mucho tiempo solo se veían por momentos, sus miradas se cruzaban constantemente y sentían una electricidad que les recorría el cuerpo, la cual forma el eclipse más poderoso que pudiera existir, un momento de oscuridad que solo ellos conocían.
Un día decidieron acercarse tímidamente y escondidos del caos, sin decir ni una palabra, sus cuerpos se fueron acercando, casi rozándose. La tensión comenzó a subir y los ojos de ambos se fijaron el uno con el otro. Todo el ambiente a su alrededor desapareció, solo son ellos dos. Las miradas se hacen más intensas y se sienten atraídos el uno hacia el otro. El ambiente se cargaba de magia e ilusión.
Cuando por fin decidieron decir una palabra fue James que propuso encontrarse infiltrarse en la coronación de Amelia que seria en una semana para poder conocerse.
