Parte I : Vacío en el universo.
El vacio, la nada, la ausencia de todo, eso era lo que había cuando la nada no era más que la nada, cuando todo lo que había era un infinito mar de silencio y vacío, cuando no había criatura alguna para hacer ruido y con su ruido alegrar el inmenso lienzo del espacio, cuando no existía vegetación que llenará de ese maravilloso oxígeno tan fundamental para vivir, cuando no había emoción alguna para transmitir ni con quién compartir.
En el inmenso espacio vacío, no había nada ni nadie, no había quien lo gozara; en el inmenso espacio vacío, no había conocimientos, no había nada que atesorar, no había nada que amar ni que explorar.
El vacio era tal como una mente ignorante y carente de creatividad, inmensa, pero sin nada especial; como estar con alguien mediocre, carente de personalidad.
El vacio, un sentimiento, un estado que te hace sentir las ganas de acabar con él lo más pronto posible, porque ver ese vacío era como estar estancado toda la vida, con propósitos, con metas, con ambición, pero estar estancado simplemente por miedo, por miedo a cosas ajenas, egoístas y meramente mundanas.
Pero entonces una luz cego todo y todo ya no era nada.
Parte II: Seres perfectos.
Seres con raciocinio habitaban lo que antes era solo vacio, haciendo hermosa y amena la existencia. se denominaron a sí mismo dioses al ser una creación pura, la primera creación.
Era la tempus perfectionis, la primera era, su sociedad era magnifica, sus vidas con sentido y carentes de dolor, civilizados y con mucho conocimiento, gracias a qué eso era lo que le daba sentido a su vida, buscar conocimiento. No son seres cualquiera, son seres excepcionales, con poderes inimaginables, como proyectar imágenes desde su mente y teletransportarse y más, son seres maravillosos.
terra deorum era el lugar dónde ellos vivían, un lugar perfecto... Pero nada puede ser tan perfecto para siempre.
Cada vez había más dioses y no todos compartían las mismas ideas, haciendo que los dioses se comportaran de formas hostiles con con los demás, lo que dió a la tempus depravationis, la segunda era.
Era en que terra deourum paso a ser gobernada por solo uno y ese uno no era más que un mediocre y como mediocre se hizo con todo el poder y limito a todos los dioses dependiendo de sus creencias y de su rango, haciendo una sociedad supremamente desigual y trayendo con sigo la corrupción de los seres que alguna vez fueron magníficos y perfectos en todo sentido.
Parte III: No se apartan del mal.
— Me encuentro perdido dentro de mis pensamientos, me encuentro perdido en el mundo, ¡me encuentro perdido, maldita sea!... me siento sin propósito alguno, me falta algo para avanzar, para no sentir este vacío dentro de mí, ¿pero que es? — dice acostado en el piso, mientras mira fijamente el infinito sobre el.
Flash Back
Su padre no era más que hombre inculto y agresivo que decía ser santo, pero solo para ganarse el favor del gobernante de Terra santa, de middelmådig, ya que eran parte de la nobleza, su madre también decía ser santa, pero solo lo era de palabras, ya que sus acciones no eran buenas, brindaba todo el respeto a lo sagrado, pero no sé apartaba de mal.
El joven chico, llamado duine, un chico muy calmado y con cara inocente, aunque sabía valerse por si mismo gracias a la tragedia de vida que le había tocado, era un chico muy bien portado y amable, que aunque tuviera lo básico, sabía que eso no era lo suficiente, sabía que sus padres eran personas que no tenían ni el menor respeto verdadero por las cosas santas y que eran mediocres en todos los sentidos, lo que hacía que su economía aún y siendo de la nobleza no fuera muy buena.
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INFINITO
FantasíaNo sabemos nada en realidad, lo que sabemos no es suficiente. Buscar respuestas a lo desconocido es apasionante para cualquier ser humano, mirar más allá de simplemente lo que vemos, dar una una vista más profunda de todo y conocer nuevos mundos, nu...