True Love!! - HyunHo

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- Oh Dios... así, ahí... ahh-ahi, si - gimes mientras montas a Hyunjin, tus manos sobre parte de la remera de su pecho y hombro, presionando, enterrándote profundo, haciendo movimientos circulares.

Habías solo tomado alcohol –cerveza con soju-, y quizás por eso estabas tan caliente. Cuando viste a Hyunjin entrar a tu remolque simplemente lo tiraste sobre tu cama, le bajaste el pantalón y metiste su miembro aun no duro en tu sensible agujero.

Solo basto unos segundos para que se pusiera erecto dentro tuyo y pudieras cabalgar con más profundidad sobre el menor.

- Mierda... Hyung, la próxima... mierda, la próxima al menos espere a que esté duro - jadeo Hyunjin apretando tus muslos.

- Mmmh... si, o podrías entrar cuando ya estás listo - gimes haciendo movimientos circulares con el pene dentro en su completud.

Dios. Realmente habías desperdiciado años de tu vida. Si hubieras sabido que se sentía tan bien el sexo anal hacía mucho tiempo que hubieras aceptado todas las veces que colegas productores te habían invitado a tener sexo.

- Pero si me lastima no podra-

- Usaré tu boca, o podría buscar algún otro pene - le interrumpes mirándolo con los ojos entrecerrados desde arriba debido al sudor que bajaba por tu frente.

- ¿Buscar a alguien más? - pregunta, una ceja curvándose.

- Si, quizás dos penes, quien-Oh, sí, ah-así – gimes agudo cuando eres dado vuelta, quejando de espalda casi al borde del colchón, siendo penetrado con fuerza.

Cada embestida rompiéndote, su voz raspando tu garganta en cada gemido.

- No puedes buscar a nadie más- gruñe Hyunjin apretando con tanta fuerza tu pierna y brazo que estabas seguro te dejarían marcas - a nadie - y muerde tu hombro, ese lugar ardiendo, quemando.

El orgasmo te golpea con fuerza haciendo que te corras sobre la remera de Hyunjin, quien sigue embistiendo de manera brusca, dura, su respiración errática y fuerte es lo único que tus oídos captan.

Se corre dentro tuyo, su cálido semen en tu tracto. Se sale, sube su pantalón y sale del camión, azotando la puerta.

- Oh... Dios, que buen sexo - susurras sin voz, tu mano yendo a tu agujero sensible aun palpitando del cual escurre si corrida.

[♡]

La primera vez que habías visto a Minho había sido en una cafetería que estaba a la vuelta de tu universidad.

Amor a primera vista. Solo esas palabras podrían describir ese momento.

Estas seguro que nunca habías visto a un chico tan hermoso antes. Recuerdas hasta cuando una vez lo habías seguido un par de cuadras, porque iban por el mismo lado. Nunca se había salido de tu mente ver como sacaba alimentos para gatos y les daba a los que se cruzaba en la calle.

Lo viste en aquel café casi por medio año, siempre en el mismo lugar y a la misma hora. Pero nunca te animaste a acercarte, a hablarle.

Un día solo lo dejaste de ver.

Creíste que si el destino quería que la vida los volviera a cruzar, y si ese momento no era lo suficientemente tarde como para que hayas decidido formalizar una pareja, es que debías tomar coraje, y hablarle.

Acercarte.

Por eso cuando Jeongin te obligo a participar del programa de mierda solo te quedaste al verlo a él.