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Tanjiro

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Tanjiro

Tenía a nezuko frente a mi en su cara había una expresión difícil de descifrar, estaba en shock después de lo que le conté.

-Espera, espera ¿Lo que dices es verdad?-

-Si, se que es difícil de creer pero es verdad, todo lo que te dije es verdad-

-¿Kanao enamorada? Pero eso no es lo sorprendente, lo sorprendente es ¿De la niñera? ¡Y las dejé solas en la casa! ¡Soy tan idiota que no me di cuenta! ¡Claro por eso quería que me llevará a los niños! No puede ser ¿Cómo no me di cuenta?-

-Tal vez, por qué kanao-chan no daba señales de estar enamorada, ya sabes siempre a tratado de manera indiferente a todo aquel que se le acerca, aunque con aoi-chan tiene más concideraciones-

-Bueno, eso ya no es de importancia, ahora no te preocupes por lo otro, me comunicaré con el detective, y le informaré su nueva misión- nezuko hablaba con una confianza que me hizo sonreír.

-Gracias, siento que tengas que hacer esto- mencione rascando mi nuca nerviosamente.

-No te disculpes, lo hago por todo lo que tú y kanao han hecho por mi, además si yo soy quien mueve los hilos, los padres de kanao no sospecharan de ti o de kanao, es mejor que lo haga yo, así ustedes no corren peligro, ya sabes soy la tía solterona-

Solté una risita ante sus últimas palabras, nezuko nunca a tenido pareja, lo cual me sorprende ya que ella es muy linda.

Después de horas más hablando sobre que haríamos me despedí de nezuko, y fui a casa, cuando entre a la sala ví una escena muy graciosa de aoi regañando a kanao como si fuera una niña pequeña.

-No es bueno que te excedas con respecto al alcohol-

-Lo siento mucho, aoi-chan- susurro con la cabeza gacha kanao.

Solté una risita, a lo cual aoi volteo a verme

«Oh, estoy en problemas»

En pocos minutos, aoi también me estaba regañando a mi.

«No debí venir a casa por hoy»

Aoi nos regaño por una hora, me sentía un niño, me recordó a cuando mi madre me reprendía por escaparme con kanao.

-No vuelvan a hacer algo así-

-Lo sentimos- mencionamos los dos al mismo tiempo.

-Bien, ahora voy a hacer la comida, ¿Pueden ir por los niños a la escuela?- nos pidió, kanao y yo asentimos, no queríamos otro regaño.

¿Me enamoré de la niñera? Kanaoi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora