Mi Casualidad Más Hermosa

3.

Hace 2 años atrás...

POV Lily:

Hoy empieza mi segundo año de universidad y la verdad es que no estoy emocionada de volver a la misma rutina, pero en fin, necesito obtener mi título para ser alguien en la vida. Por suerte, mi carrera no es aburrida y me encanta el campo de la gastronomía.

Hoy habrá un pequeño festival y otras actividades para darle la bienvenida a los nuevos estudiantes. Además, tendremos un partido de fútbol contra otra institución y yo soy la capitana del equipo de mi universidad, así que tengo que asistir obligatoriamente.

POV Sofia

Hoy es mi primer día en la universidad y estoy muy nerviosa. No soy buena socializando y me preocupa no caerle bien a la gente. Estudiaré medicina, una carrera conocida por ser estresante, y no sé si estoy preparada para ello, especialmente siendo una chica de apenas 19 años.

Llegué a la facultad y sentí muchas miradas sobre mí, lo cual me puso los pelos de punta. Me acerqué a una pequeña oficina para recoger mi horario y me alegró ver cómo se ajustaban mis clases. Sin pensarlo más, fui a mi salón para explorar el lugar. De repente, choqué con una chica castaña, se veía muy amigable y debo admitir que me agradó mucho.

– Disculpa, dijo ella en un tono muy suave.

– No te preocupes, perdóname a mí, no me fijé a dónde iba.

– Tranquila, un placer. Me llamo Valerie.

– El placer es mío, respondí un poco tímida. Yo me llamo Sofía.

– ¡Ey! También eres nueva, ¿verdad? Me preguntó.

– Sí, así es, y no conozco a nadie aquí.

– Bueno, yo tampoco, pero mira el lado positivo: ya nos conocimos las dos. ¿Te parece si nos quedamos juntas para no sentirnos tan solas? Preguntó.

– Me parece perfecto, respondí.

– Escuché que habrá un partido en un rato. ¿Te gustaría ir a verlo?

Yo acepté con un poco de emoción.

POV Lily:

Cuando llegué a la cancha, me dirigí hacia mis compañeras de equipo para animarlas y prepararlas. Después de todo, soy su capitana. Sentía que la mayoría de ellas estaban nerviosas para este juego, y debo admitir que yo también lo estaba, considerando que nuestro rival era muy fuerte. Les aconsejé que utilizarán esos nervios a su favor en lugar de en su contra.

De repente, el entrenador llegó y nos indicó que empezáramos a calentar antes del partido. Las chicas y yo nos preparamos para comenzar el calentamiento. Las gradas de la cancha empezaron a llenarse, lo cual no me sorprendió, era lógico que hubiera una gran cantidad de personas. Sin embargo, sentí un escalofrío y giré mi cabeza hacia la entrada de la cancha. Ahí estaba ella, una chica muy hermosa, con unos rizos espectaculares, una sonrisa bellísima y unos ojos impresionantes. Nuestras miradas se cruzaron y, de manera involuntaria, le sonreí. Vi cómo sus mejillas se volvieron rojizas. Realmente sentí como si la conociera de antes, como si estuviéramos conectadas por algo mágico. O tal vez solo sea mi imaginación.

El silbato sonó, dándonos la señal de que debíamos tomar nuestras posiciones, ya que el partido estaba a punto de comenzar. Di las últimas indicaciones a mi equipo y realizamos la entrada junto con el otro equipo.

Pov sofia:

Mientras avanzábamos hacia aquel partido, la emoción me invadía. Todo el mundo decía que el juego sería emocionante y, sinceramente, ¿quién se puede resistir a un buen espectáculo?