Nuestro Verano

Capítulo 3: No digas nada

<<Lo has hecho ya y la verdad me da igual>»

<< Ya viví esta escena y con mucha pena te digo no, conmigo no»

Ignorar a Pedri es algo difícil, lleva toda la mirada mirandome y molestándome, porque sí, él muy capullo le había dicho a Ansu que quería convivir más con él, ya que Ferran lo había abandonado, mentira, Ferran parece su chicle, el muy capullo había elegido la habitación que estaba al lado de la mía, básicamente lo tendré que ver durante un buen tiempo.

-¿Qué me miras?

- Lo feo que eres - dijo con una sonrisa.

- Estúpido - dije mientras volvía a coger una cuchara de mi cereal.

-Pablito, ¿estas ocupado?- pregunto mirándome.

- Si, estoy comiendo acaso eres ciego.

- Me refiero a que quiero tu ayuda - fruncí el ceño confundido.

-No estoy disponible.

- Vamos Pablito prometo hacer lo que quieras - cuando escuche eso sonreí.

-¿Lo que quiera?

- Lo que quieras Pablo.

- Pensándolo bien podemos ver yo antes de ti mientras comemos helado y ya en la noche podemos hacer lo que quieras- dije sonriendo.

-Trato hecho Pablito - sonreí como un idiota.

- Te espero a las tres en mi habitación, no te olvides de
traerme helado, ya sabes cual es mi favorito - le guiñé el ojo y subí a mi habitación.

Encendí mi teléfono para avisarle a Ansu para que no llegue temprano, Pedri, Pedri, el estúpido capullo que me enamoró el verano pasado, aún puedo ver en su mirada algo de amor por mí, espero no equivocarme, una parte de mi está enojada con él por no creerme y la otra parte quiere que regrese a decir ojitos bonitos.

Mi puerta sonó y supuse que era Pedri, así que con una sonrisa abrí la puerta.

-¿Siempre has sido así de tardón? - preguntó con una sonrisa.

- Callate y entra - dije rodando los ojos.

- Traje helado de menta, tu favorito - mis ojos brillaron al escuchar eso, aún recuerda lo que me gusta.

-Muchas gracias, pondré la película.

Estaba algo nervioso, después de cuatro meses volvía a tenerlo así de cerca.

-¿Cómo está Aurora?

- Muy bien, me prometió visitar el otro mes - dije sonriendo.

-Fernando también viene el otro mes - dijo devolviéndome la sonrisa.

-Fernando y Aurora juntos son un total desastre - dije mirandolo, aún tenía esos preciosos ojos marrones.

- Espero que no causen tantos desastres, tu cumpleaños es en dos meses¿verdad? - preguntó dudoso.

- Si, el cinco de agosto cumplo diecisiete años - aún no tenía planeado nada para esa fecha.

-Saldras con tus amigos de la escuela - solté una risita por lo que dijo.

-Solo tengo dos amigos Pedri, Lia y Lucía.

- Lo siento, olvidé que tenías ansiedad social - dijo mientras miraba incómodo la televisión.

-No pasa nada, poco a poco he ido superando ese tema - dije sinceramente.

- Eso es muy bueno oji... Pablo - estaba seguro que me iba a decir ojitos bonitos, mi corazón dio pequeños saltos de felicidad.