Aula 5B (Triologia 5B)

8. mudanza 1/2

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"mudanza 1/2"

Yon puso la última caja en el carro de mudanzas, se seco la frente en donde tenía una capa fina de sudor.

Suspiro y se adentro a su "Casa", habían unos hombres ayudando a montar unos muebles y otras cosas.

Se sentó en el banco que estaba en la sala, miro a los lados y observo como no estaban algunas cosas. Los muebles no estaban, una mesita de noche, ni tampoco el cajón en dónde se pegaba cada segundo.

Suspiro y pensó en que buenos momentos en esta casa, creo que fue lo mejor de esta casa, los recuerdos hermosos y felices.

Yon observo a su hermano llegar y sentarse a al frente de el. Parecía algo ¿Confundido, triste?.

—¿Ya pusiste tus cosas al camión?—el chico asintió con una pequeña sonrisa.

—Todo, todito—canturreo, Yon río y el también al final suspirando

—¿Estás bien?—Yon observo como su pequeño se removió en el piso.

—Es que...—El niño suspiro de nuevo y miro al piso—¿Acaso papa trabaja mucho? ¿El de verdad está de viaje todos los días? O... ¿No le importamos mucho?

Yon no se sorprendió mucho con las preguntas de su hermano, el sabía lo que eran esas preguntas.

Su padre no era malo, solo su ausencia afectaba en casa.

Yon suspiro y optó por llevar afuera al porche a su hermano y sentarse en el columpio.

—Oye, tranquilo ya verás que papá pasará más tiempo contigo, y con magna. No te preocupes, el solo está trabajando y ocupándose con algunas cosas. Pero te lo prometo, va a estar más aquí. Solo aguanta un poco ¿Okey?—le sonrió al niño, y el ya no estaba con esa carita triste.

—¿Lo prometes?—al niño se le iluminaron los ojos

—Por la garita—choco su cabeza con la del niño y luego disimularon un desmayo. Marco se rió y escucho como magna lo llamaba.

Pronto se dio cuenta que su padre estaba en la puerta, mirando a sus hijos. Marco paso al lado de él y le dio un suave empujón

El niño río y fue a dónde estaba su madre.

Yon suspiro cuándo su padre se sentó a su lado, los dos miraban al frente en donde estaba el camión y Magna dando indicaciones a los señores que estaban ayudando.

—Solo te pido una cosa, no cometas el error que cometiste conmigo, no se lo hagas a Marco—Yon aún miraba al frente.

—Lo se, es solo que...—su padre suspiro y se echo hacia atrás, causando que Yon se pegará más a él—Sacare tiempo para los tres, lo prometo. Esta ves lo haré

Su padre paso el brazo por sus hombros y Yon se masajeo las sienes.

—No me importa si no pasas tiempo conmigo, solo pásalo con Marco. Solo eso papá, por mi no te preocupes, ya estoy acostumbrado—lo último lo hizo sin pensar. Los dos quedaron en silencio y Yon se arrepintió—Lo siento, no debí decirlo ya se...

—No, lo que dijiste es cierto. No te disculpes hijo—el brazo del señor lo apretó aún más y Yon tuvo que parpadear varias veces para no llorar.

Pasaron unos minutos más y los dos hombres se pararon a ayudar con lo que faltaba.

...

—¡Yon apúrate!—Yon escucho como Marco lo llamaba desde afuera.

—¡Ya voy!—grito de vuelta.