Aula 5B (Triologia 5B)

20. La verdad siempre sale a la luz 2/2

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"La verdad siempre sale a la luz 2/2".

—El carro, huele a ti—Dijo Nat con timidez—Huele muy bien, me gusta.

—Bueno, gracias—ella vio lo radiante y grande que era la sonrisa de Yon.

Los dos se quedaron callados al momento en que salieron del estacionamiento de la escuela, era un silencio comodo, pero la cabeza de Nat estaba echa un desastre.

Se sentía estafada, muy tonta y sin menos autoestima que antes. Como lo había dicho antes una parte muy pequeña de ella quería que fuera broma y que por fin ella ser la primera opción.

Pero no lo era, y solo una ridícula y estúpida apuesta.

¿Que tan mal estaban esos chicos para hacer eso?.

Por mas que quería no llorar, no lo logro. Algunas lagrimas traicioneras salieron de sus ojos, con discreción y rapidez se las seco.

No necesitaba que Yon se preocupara aun mas por ella.

—Y llegamos—Yon aparco en la entrada de la casa de ella.—Sigo diciendo que eso es verde.

—Es azul—Nat se rio recordando la primera vez que la dejo en su casa.—Gracias por traerme, y perdón por hacer que tu noche fuera aburrida.

—¿Aburrida?—el bufo girando su cuerpo para verla—¿Aburrido, porque se que ganamos contra los veteranos, que pase un rato con una hermosa dama en el asiento copiloto de mi auto?. déjame decirte no es para nada aburrido.

Ella no sabia que decir, rayos. Sonrió nerviosa y negó con la cabeza.

—Bueno galán, ya me voy—dijo abriendo la puerta, escucho como el hacia lo mismo de forma apresurada y justo cuando dio un paso para ir a la puerta de la casa de sus padre, Yon ya estaba a su lado.

Bueno el chico tenia piernas largas, el daba 1 paso, ella 4 pasos para poder alcanzarlo.

Eso la hizo reír, pero disimuladamente cubrió esa risa que quería salir.

—No es nada por traerte—dijo Yon mirando la casa de Nat—Es mas, cuando quieras puedo ser tu chófer.

—Claro, mi chófer personal.—dijo con gracia Nat, Yon asintió frenéticamente causando que ella se riera.

Cada uno se fue a sus respectivas casas con una sonrisa boba en sus labios, Nat entro y lo primero que vio fue a sus padres sentados en la sala mirando la tele.

—¿Nat?, ¿En donde esta Nora?—dijo de inmediato su madre.

<<Si mama, yo estoy bien gracias por preguntar>>.

Se dijo Nat con sarcasmo, una sonrisa surco en su labios por ese comentario en su mente.

—Niña te estoy hablando—presto a su madre que la estaba mirando.

—Lo siento, Nora se quedo en casa de Juancho para celebrar con el equipo.—mintió, la verdad no iban a casa de Juancho, iban a una posada algo lejos de su casa.

—¿Y tu porque no te quedaste hija?—dijo su padre mirándola con curiosidad, era raro que las gemelas se separen.

—No me siento bien del estomago—dijo de inmediato, al menos dijo algo cierto.

Con eso se fue a su cuarto, en el camino vio que su hermano no estaba, así que se fue a su habitación.

Dejo su teléfono en la cama y corrió al baño, se arrodillo en el inodoro y con algunas lagrimas por volver a caer en lo mismo.