𝑫𝒆𝒍𝒊𝒄𝒂𝒕𝒆 [𝑺𝒖𝑯𝒐/𝑺𝒆𝒐𝑱𝒖𝒏]

C I N C O

SeoJun sentía que se enfermaría pronto, después del día de la tormenta, Suho sólo se había encerrado en su habitación y no le había dirigido la palabra.

Sus padres ya se encontraban trabajando, la señora Lee había conseguido un empleo en Busan como contadora en una oficina, sin duda a la madre de los chicos jamás le había gustado estar sin tener un empleo por lo que en cuanto llegó se dedico a conseguir uno hasta que lo encontró. Por lo que ambos sabían, el empleo de sus padres tomaba más tiempo y dedicación, por eso ambos estarían bastante solos al menos hasta que ambos regresaran a la escuela.

Llevaba varios días sin hablar con SuHo y no entendía porque eso le entristecía, al final de cuentas él sabía que el castaño siempre era tibio con él, aunque llegó a ilusionarse con que tal vez las cosas podrían empezar a cambiar entre ellos.

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SeoJun se encontraba realmente enfermo, su resfriado cada vez empeoraba, su madre lo había estado cuidando mejor que nunca y eso a SeoJun lo hacía sentir tan querido por la mayor, él suponía que su madre obligaba a SuHo a llevarle la comida y las píldoras a la cama, desde que enfermó su hermano simplemente dejaba su desayuno y comida sin dirigirle la palabra y se iba a su habitación, un día sólo entró y le dijo, "mamá te hizo la sopa que tanto te gusta y dejó eso para ti" su madre era tan generosa.

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SuHo no era tonto, desde que el menor enfermó este lo había notado y a pesar de que no quería hacérselo saber, SuHo sabía que que su madre no era tan atenta con sus hijos como para cuidar de SeoJun o para preocuparse por este, por eso SuHo le preparaba sopas y le daba pildoras para mejorar su gripe, aunque el mayor le decía a SeoJun que su madre era quién le preparaba todo antes de irse a trabajar y SeoJun por supuesto que le creía, SeoJun jamás lograría odiar a la madre de ambos, mucho menos cuando lo era todo para el menor, si tan sólo SeoJun supiera todo...

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SuHo se había despertado lo suficientemente tarde, en cuanto se dio cuenta de la hora, noto que no le había preparado desayuno a SeoJun por lo que se levantó muy de prisa a prepararlo pero no escucho ningún ruido proveniente de la habitación del menor por lo que decidió tocar la puerta, no recibió respuesta alguna, por lo que abrió la puerta, en cuanto puso un pie en la habitación notó que el menor de los hermanos no estaba.

—¿SeoJun? ¿Estás aquí?

El castaño buscaba en el closet, incluso llegó a pensar que estaría en el baño, lo busco por la enorme casa, y no había ningún rastro del menor, por lo que empezó a preocuparse.

SuHo no dudo ni un segundo en tomar su abrigo y salir a buscar a su no hermano, comenzó a buscarlo por el vecindario y en las tiendas cercanas preguntando si alguien lo había visto, para su mala suerte, nadie había visto al menor. Y peor aún parecía que el día lo detestaba porque empezaba a llover y él aún no sabía donde estaba su hermano.

Suho había buscado por todas partes, parecía que no había rastro de su hermano, en ese momento se odiaba tanto por nunca haberle pedido su número telefónico al menor. Hasta que recordó que su madre al llegar a Busan les había dicho que había una iglesia preciosa a la que debían ir, no era que SeoJun fuese religioso pero sabía que a su hermano le gustaban los lugares en los que no hubiese gente por lo que su última esperanza era que el menor estuviese ahí.

Corriendo bajo la lluvia sabía que de seguro él también se resfriaría pero en ese momento sólo le interesaba encontrar a su no hermano.
Cuando estuvo al frente de la gran iglesia sólo pudo notar que dentro no había nadie, por lo que con miedo entro con esperanza de que su hermano si estuviese ahí, estaba completamente vacío, hasta que justo al frente logró divisar una cabellera oscura. En ese momento agradeció a todos los dioses existentes por haberlo encontrado, sin dudarlo se acercó hasta el menor.

—¡Por dios que no pensabas llegar a casa!—Suho parecía furioso aunque sólo estaba aliviado.

—Qué carajos haces tú aquí, vestido así y peor aún mojado

—No seas idiota te he estado buscando por todas partes

—¿Y a ti qué te importa donde esté?

—No es que me importe pero mamá me va s matar si te pasa algo.—dijo el mayor tomando asiento a lado del azabache.

—¿Por qué me mentiste?

—¿De que hablas?

—No te hagas el tonto, sé que mamá no me ha estado preparando los desayunos, ni siquiera tenía idea de que estaba enfermo

—Ya te lo dije, es para salvar mi pellejo

—Mamá ni siquiera tenía idea, esta mañana le agradecí por la comida y los medicamentos y me observó cómo si estuviese loco.

SeoJun no comprendía las acciones del mayor, trataba de comprender porque era tan tibio con él pero sólo lograba confundirse más, cuando supo que su madre no era quien se preocupaba de esa manera por él, no se sintió triste, por el contrario sintió una inmensa felicidad de que todo eso le naciera a su hermano. Quizá correr a la habitación del mayor y abrazarlo, agradecerle, pero lo único que hizo fue salir de casa y correr al lugar más vacío para lograr pensar que pasaba por la cabeza del mayor.

—Gracias Suho, por todo lo que has hecho esta semana. Te amo, sé que tú no lo haces pero yo lo hago todo el tiempo, cada día.

Suho no respondió, sólo logró sentir la cabeza de su hermanastro apoyarse en su hombro y abrazar su brazo, no hizo nada por moverse, ni siquiera mover a Seojun, simplemente hizo lo que no había podido en tantos años, disfrutar la cercanía de ambos.

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Realmente espero que estén disfrutando el fanfic, no había actualizado porque no tenía idea de si realmente podía tener apoyo hasta que vi unos cuantos votos y decidí actualizar hoy, espero estar actualizando cada sábado al menos dos capítulos. Si les gusta no olviden de votar y comentar que les pareció 💗