(MTL) En el fin del mundo quiero mantener en cautiverio a esa aburrida calabaza

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Capítulo 41

Finalmente, estaba Mapo Tofu en la mesa de la cena, y Lu Feng tuvo que decirlo con amargura. Sin embargo, con su abuela y su tía protegiéndolo, Lu Feng no pudo decir algunas palabras antes de que los dos lo reprimieran, y Lu Feng estaba tan enojado que se lo comió, la mayor parte del mapo tofu.

Por la noche, después de que todos se durmieron, Jiang Xiaoxiao y Huo Cheng salieron de la aldea de Xiaojiang en la oscuridad. No había luz de luna ni luces de la calle, por lo que era muy difícil ver afuera.

Para evitar que otros en el pueblo lo supieran, los dos sacaron sus linternas para iluminarse después de salir del pueblo, debido a que recientemente había más gente de afuera, los dos no eligieron motocicletas, sino que anduvieron en bicicleta hasta el ciudad.

Huo Cheng sonrió y convirtió su bicicleta en una motocicleta expresa.

Cuando llegamos a la ciudad de Ping'an, las luces de la ciudad estaban tenues, no tan brillantes como la última vez que vinimos, y los alrededores estaban muy tranquilos. Cuando pasamos nuevamente por el puesto de socorro, no había personal de servicio en el puerta, se habían construido muros a su alrededor y la puerta estaba cerrada con llave.

Huo Cheng caminó dos calles con una sonrisa y finalmente se detuvo en la puerta trasera del supermercado Jiajiafu original.

"¿Está todo aquí?"

"En el almacén subterráneo".

Los dos rompieron varias cerraduras y finalmente entraron al almacén en el tercer piso subterráneo. Había muchas necesidades diarias, ropa, arroz, harina, granos y aceites amontonados en el almacén. La cantidad estaba más allá de la imaginación de Jiang Xiaoxiao.

"Hermano, hay tantos, ¿cuánto debemos tomar?"

"Toma la mitad".

Jiang Xiaoxiao obedientemente recogió la mitad de los suministros, y cuando los dos salieron, Huo Cheng tomó otra caja de cosas y esparció algunas por el camino, hasta que llegaron a la puerta trasera de Jia Jia Fu.

Al igual que la última vez, los dos fueron a una comunidad llena de gente y sacaron algunos suministros más antes de abandonar silenciosamente la ciudad de Ping'an. También fueron los primeros en descubrir que el almacén de Jiajiafu fue asaltado y robado en medio de la noche. ... Me llevó tres días descubrirlo.

Jiang Xiaoxiao regresó para recuperar un largo sueño. Cuando se levantó, la casa estaba en silencio. Se frotó los ojos y salió. Solo la abuela y Dabai estaban en la sala de estar. Cuando la abuela vio que Xiaoxiao se despertaba, puso la comida caliente en la mesa:

"¿Tienes hambre? Come rápido".

"Bueno, abuela, déjamelo a mí un rato. ¿Dónde están mi hermano y los demás?" Después de mezclar el agua caliente, Jiang Xiaoxiao conversó con la abuela mientras se lavaba.

Su Wenqing guardó la comida y se sentó en el sofá, mirando por la ventana con preocupación: "Todos fueron a talar árboles".

"¿Talar árboles? ¿No prohíbe el jefe de la aldea la tala indiscriminada?"

"Ésta es una situación especial".

En los últimos días el tiempo ha estado sombrío y sombrío, muchas personas mayores sienten que Dios debe estar preparando una gran tormenta de nieve y las llamas de las personas que recogen leña se han vuelto mucho más altas hace un tiempo.

Hasta que Huo Cheng fue a buscar a Jiang Zhenyuan, varias personas mayores de la aldea estaban allí en ese momento. Se asustaron un poco cuando escucharon la suposición de Huo Cheng, pero después de pensarlo detenidamente, la suposición de Huo Cheng no era descabellada. Se han producido altas temperaturas y no es imposible que se produzca un granizo raro.