⋆𝗩𝗲𝗻𝗱𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗮𝗺𝗼𝗿 - 𝗧𝗶𝘁𝗼𝗽𝗼 - 𝗖𝗗𝗡 ˚⋆⸜

𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝟢𝟧

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Las horas ya habían transcurrido en Uruguay, lleno de agitaciones y emociones encontradas.

La noche había caído en la cuidad de Montevideo, Gustavo decidió acompañar a Roberto hasta su auto mientras hablaban de otro temas para despejar la mente del rizado.
Topo veía la sonrisa llena de brillo del vocalista aun que solo fuera un momento de felicidad le encantaba verlo de ese modo.

Roberto se sentía mucho mas tranquilo estando alado del guitarrista, sentía un apoyo y calidez que desde hace tiempo no sentía cuando se casó, sentia una vibración rápida en su pecho cada vez que intercambiaban palabras con el de lentes.

Mientras iban caminando al auto de Roberto una calidez en sus manos se hizo presente que para el guitarrista por curiosidad bajara la mirada a donde sentía ese calor, era su mano entrelazada ligeramente con la de Roberto, esto generó un rubor color carmesí para el de lentes y para el contrario tardo unos segundos para darse cuenta de ese detalle para que su cara se tornará de un color rojo tenue.

───Perdón n-no era mi intención. ─── artículo algo avergonzado el rizado soltando del agarré inconsciente de estos dos.

Gustavo solto una pequeña risa por el nerviosismo y ver la cara roja de su acompañante, esto provocó que Roberto desviará la mirada, sentía como su cara esta hirviendo por el calor de la situación.

───¿Querés que te lleve a tu casa, Gus? ───consulto para el contrario mientras abría la puerta del auto por la parte del copiloto.

───Si no es molestia. ───Sonrió achinando sus ojos cafés riendo bobamente.

───¡Para nada subí! Vos nunca serás una molestia para mí, Gustavo. ───Dijo casi murmurando mirando directamente a los ojos del que es un poco mas bajo que él, sentía la necesidad de verlo.

Subieron al auto, Roberto ya conocía en dónde era la casa de Gustavo desde la última vez que lo había dejado ahí.
Siguieron hablando creando un ambiente totalmente agradable despejando sus mentes aún que sea solo unos minutos en su día.

Llegando a la casa del menor se despidieron con un beso en la mejilla, aún que esto fuera totalmente normal para la cultura de su país y casi siempre se saludaban o despedía de este modo con sus amigos, Roberto sintió un pequeña descarga eléctrica por su cuerpo al juntar sus labios en la mejilla de Gustavo, éste sonría embobado mirando unos segundos al rizado.

───Chao Rober, Buenas noches. ───Dijo para el enrulado que mantenía ese ligero sonrojo en sus mejilla.
───¡Uh! Casi olvido, Rober, ten mi número, ya sabes por si lo necesitas ya saber a quien llamar. ───Dijo nerviosamente entregándole un trozo de hoja de libreta con el número de Gustavo. Este bajo del auto para adentrarse a su hogar despidiéndose del rizado.