El cadáver del novio |tk

Capítulo uno

La vida generalmente no suele ser justa muchacho, la desigualdad abunda en el mundo y aquellos que se encuentran en la cima únicamente buscan poder.

"¿Y tú qué es lo que buscas?"

"Ser feliz"

—♡—

En Evighet es bastante común escuchar el leve bullicio de los comerciantes a altas horas del día, ya que las personas de aspecto triste y andrajoso salen a trabajar metódicamente a diario. Es lo usual en un pequeño pueblo olvidado como en el que vive TaeHyung.

El mismo que se encontraba sentado en su viejo y decadente escritorio de madera roída, la cual con el tiempo había perdido ya todo su color, curiosamente como el resto de objetos inanimados que lo rodeaban a él y a su familia, por no decir que inclusive el pueblo entero se encontraba igual de marchito.

Dibujaba, le gustaba mucho hacerlo ya que en el papel podía plasmar de manera adecuada lo que muchas veces no podía en sus confusos pensamientos.

En este caso, siendo una etérea mariposa el trazo realizado por sus largos falanges.

Necesitaba perderse entre papel y tinta para no sucumbir a la incertidumbre que lo carcomía por dentro, a medida que el "tictac" del reloj avanzaba.

Esa misma mañana, a penas el sol decidió intercambiar su lugar con la luna, se dedicó a observar a los delicados insectos en un rosal de la casona vecina y terminó seleccionando la que creyó, a su criterio, más hermosa.

Y en un pequeño tarro de cristal colocado justo al borde del escritorio, se encontraba momentáneamente aquel ser alado que había usado como referencia para su dibujo.

Una vez acabado y quedando satisfecho con el resultado, se dispuso a dejar en libertad a su pequeña musa, por lo que levantándose de su cómodo asiento se inclinó y apoyó las manos cuidadosamente en el cristal que daba vista hacia la calle principal en la que habitaba.

Con un leve empujón abrió las ventanas de par en par, para luego tomar entre sus dedos el pequeño frasco. En cuestión de segundos giró la tapa que daba acceso y contempló completamente maravillado como la linda mariposa de color azul se alejaba felizmente.

Sus alas llenas de vida resaltando entre el entorno de tonos monótonos que la rodeaban.

No tuvo tiempo ni de sentirse más desdichado por aquel detalle cuando la brisa que se hizo presente en sus fosas nasales trajo consigo el nauseabundo olor a pescado que impregnaba el lugar.

—Es asqueroso—su tono barítono resonó en la desolada habitación, mientras una mueca de completo asco hizo que arrugara la punta de la nariz.

Tuvo el repentino impulso de cerrar la ventana nuevamente, pero al dar un vistazo más detallado al exterior se percató de la presencia del viejo Cho, quien era el encargado de los anuncios importantes.

— ¡Atención, atención!—enunció seriamente con un tono de voz grave y cansino por estar realizando su labor los últimos 30 años sin cesar—. ¡Diez minutos para iniciar el ensayo de la boda de TaeHyung Van Dort!—gritó, moviendo de un lado a otro la campana que acompañaba su vocerío, el insoportable tintineo repiqueteando en sus oídos mientras observaba completamente indiferente, pero con una angustia creciente en su interior, al anciano seguir con sus anuncios.