Amor A Medianoche

Concierto

Capítulo tercero

Logan

Me despierto luego de la larga siesta que me di, lo primero que hago es darme una ducha y vestirme, me visto con unos jeans negros, una polera negra y unos tenis blancos, cojo una de mis tantas guitarras, color negro, mi favorita y salgo de mi casa.

Paso a recoger a mi mejor amigo Aiden en mi porche negro, el se sube y me saluda, es un chico más o menos de mi estatura, un poco más bajo, cabello negro y piel pálida, y sus gustos son variados, le gusta andar en moto, ir al gimnasio, porque si Aiden es aficionado al gimnasio, sin duda tiene un muy buen físico, yo la verdad también entreno de vez en cuando pero más que nada es para mantenerme en forma.

Después de recoger a Aiden manejo hasta el concierto, preparamos junto con los demás miembros de la banda los últimos detalles y nos subimos al escenario.

Al subirme al escenario lo primero que veo es a ella, esta entre la multitud de gente, se ve realmente hermosa, lleva puesto un vestido rojo que le hace lucir espectacular, sin duda Mara me atraía demasiado, era una diosa a comparación de otras chicas que e conocido, era diferente, era distinta, era jodidamente perfecta.

Mara

Llego junto a Jenna al concierto de la banda Nibs rock que es una de mis bandas favoritas, luego de que Jenna me invitará a verla, ya que sabía que me encantaba, además me dijo que habría un guitarrista nuevo, me muero por conocer al nuevo integrante de la banda, sin duda los guitarraristas son mi debilidad, son jodidamente sexis.

Jenna me pasa a buscar en su coche a mi casa, y nos vamos conversando cuando de repente dice:

―A que no adivinas con quién estoy saliendo―dice emocionada.

―Con quién pregunto―con cierto entusiasmo también.

―Con Aiden, el amigo de Logan, el chico que va en tu misma carrera.

Jenna y yo no íbamos en la misma carrera, ya que ella estudia artes y yo medicina, pero yo estudio con Aiden el chico con el que está saliendo.

Mi cara cambia del entusiasmo a la preocupación, cómo era posible que mi mejor amiga Jenna estuviera saliendo con el mejor amigo del imbécil de Logan, sin duda estaba segura que su amigo era un mujeriego al igual que él.

Pero prefiero no responderle nada malo a Jenna y solo felicitarla y desearle que todo le salga muy bien.

Cuando al fin llegamos al concierto ya había empezado, estaban tocando una canción de Chase Atlantic, cuando empiezo a ver a los cantantes y a los demás integrantes de la banda todo me pareció bien, hasta que lo ví, ahí estaba él, vestido todo de negro, con su cabello rubio tan desordenado como siempre y sus ojos verdes mirándome fijamente, cuando lo ví lo primero que pensé fue en lo guapo que se veía tocando la guitarra, pero luego recordé la tarde en la cual me había fastidiado y como había besado a esa chica y se me pasó. Deje de mirarlo para mirar a los demás cantantes y cantar las canciones junto a ellos.

Cuando terminó el concierto con Jenna nos fuimos a mi casa, ya que haríamos una pijamada, compramos algunas botanas y algunas cervezas, ya que si bien tomábamos pero nunca en exceso.

Cuando comenzó la noche lo primero que hicimos fue ver una maratón de películas, vimos culpa mía, la adaptación del libro de Mercedes Ronn y la verdad me encantó, me pareció una película buenísima, sin duda la personalidad de Noah me fascino.

Luego de ver las películas conversamos sobre la vida, Jenna me contaba lo enamorada que estaba de Aiden, y lo emocionada que estaba de volver a pintar una obra de Van Gogh, ya que a ella le encanta.

La verdad me emocionaba tanto que mi mejor amiga tuviera tanto talento, era una muy buena pintora, pintaba cuadros de famosos o creados por ella misma, y eran realmente hermosos, lo de Aiden no me emocionaba tanto ya que no confiaba mucho en ese chico, si bien nunca lo había visto con otra chica, pero al ser amigo de Logan ya uno podía desconfiar.

Logan

Después del concierto llegó a mi casa, estaba feliz ya que había sido un muy buen concierto, pero estoy solo como siempre, mi madre no está, no hay nadie para contarle como me siento, pero al fin de cuentas estar solo no es tan malo, si comparamos la decepción y el desamor con la soledad, la soledad te carcome menos.

Pienso asi para sentirme mejor, porque si me pongo a pensar lo mal que me siento de estar tan solo terminaré destruyendome y no es eso lo que quiero. Si bien a veces me dan ganas de rendirme, de no despertar más, pero cuento hasta tres y sigo adelante, porque de eso se trata la vida no, de seguir adelante a pesar de todas las adversidades que te ponga.

Me duermo ya que estoy un poco cansado, al otro día despierto y lo primero que hago es mandarle un mensaje a rayito, era domingo así que hoy no habían clases en la universidad, me muero por verla, por ver sus lindos ojos, verla sonreir, cómo la vi en el concierto, sin duda una sonrisa de ella era vida para mí.

Mara

Despierto y lo primero que veo es a Jenna dormir plácidamente con la boca abierta, me dan unas ganas de sacarle unas fotos, para luego ambas reírnos pero no lo hago, no soy tan mala, cogo mi celular y veo que tengo un mensaje nada más y nada menos que de Logan, el cuál dice:

―El rojo te sienta bien, te veias espectacular anoche.

Eso me hace sonrojarme un poco, ya que fui con un vestido rojo y una chaqueta negra no muy sobresalientes, y pensé que nadie me notaría, y en medio de la multitud el me noto.

Después de leer el mensaje decidí no contestar nada, ya que no sabía que decir, además no tenía ganas de hablar con un chico que había ofendido mis historias de amor escritas por mi, diciendo que eran unas bobadas, para eso tenía a mi padre que era más que suficiente.

Cuando Jenna se despertó preparamos el desayuno, comimos panquéis con salsa de chocolate, la verdad estaban esquisitos, Jenna era muy buena en la cocina. Luego Jenna se fue a su casa, y me quede en mi habitación escribiendo, avance unos cuantos capitulos de mi historia de romance y los publique en la aplicación donde escribo.

Me quedé pensando un momento que sería de mi sin los libros, sin duda ellos habían salvado mi vida, de todas las formas que una persona puede ser salvada.

Los libros para mí son como salvavidas para las personas que sentimos que nos ahogamos en nuestro propio mundo.