Los Primeros

Capítulo 3: Conociendo el pasado P1

Un gran silencio había en una casa donde vivían 4 personas, si no conocías a la familia creerías que es de tres porque nadie hablaba de la 4ta integrante, una niña de 5 años corría por los pasillos de la casa intentando huir de su peor pesadilla, una niña de 8 años que sostenía un cuchillo y sonreía maléficamente.

La niña de 5 años era pelirroja, delgada y muy pequeña para su edad vestía un vestido simple color rosa, mientras la niña de 8 años era una niña castaña de ojos marones que vestía una remera blanca y un jardinerito, sus padres no estaban en casa y la niñera salió a buscar algo rápidamente, pero tardo demasiado.

- Deja de correr Mia solo quiero hacerte un cambio de peinado – decía la niña de 8 años sonriendo mientras buscaba a la ahora nombrada Mia, quien había logrado meterse en el armario, sus manitos estaban apretando su boca para no hacer ningún sonido.

Escucho a la niña alejarse y salió del armario de la cocina y trato de correr a la salida desesperadamente, pero lo que no sabía era que Cassandra su hermanastra la esperaba en la puerta con su mano alzada.

Cuando la niñera llego era muy tarde Mia estaba acurrucada en el suelo y su mano estaba en su cara mientras lloraba del dolor y la niña mayor estaba en la sala mirando caricaturas.

- ¡Mia! – grito la niñera.

- ¡Mia! – escucho que la llamaban y la sacudían.

- ¿Que? – pregunto somnolienta parpadeando con cansancio y asustada.

- ¿Estas bien? Parecías tener una pesadilla - explico preocupada.

- ... si Mae no te preocupes ya me olvide – sonrió débilmente mintiendo a su prima Maeve no quería preocuparla innecesariamente.

Habían pasado casi 10 años que sucedió eso ya casi solo se volvió solo una pesadilla, no había visto a su padre y su familia desde que la abandonaron en el hospital después de ese incidente, ya no era más esa niña de 5 años asustadiza, ahora tenía 14 y lo único que quedo de ese día era la cicatriz en su rostro.

Maeve.

Vio que Mia se volvía a dormir y suspiro con tristeza mientras acariciaba su cabello rojo, había conocido a Mia cuando vinieron a visitar a su tía abuela Altea cuando tenia 7 años, Mia para ese entonces cumplía 6 años y había estado viviendo un año con su abuela.

No sabía mucho de su historia solo sabia que su padre había estado furioso con el padre de Mia, recordaba cuando se conocieron por primera vez...

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- ¿dónde estarás? - una voz sonó en un hotel mientras un hombre buscaba en la habitación algo debajo de la cama sonriendo juguetonamente.

Una pequeña risita se escuchó provenir del armario haciendo que el hombre se riera en vos baja - donde estará esa niña traviesa - exclamo antes de agacharse debajo de la cama – oh, no está – pronuncio tristemente antes de acercarse silenciosamente al armario y abrir la puerta – acá estas- exclamo lanzándose a la niña atrapándola haciendo que ella chille y se ría a carcajadas.

- Papá noo – grito riéndose cuando empezó a hacerle cosquillas, cuando se separaron escucharon el celular sonar haciendo que a niña se entristezca.

- No pongas esa cara bebé, hoy visitaremos a la abuela recuerdas - recordó su papá sonriéndole emocionado antes de bajarla para contestar la llamada saliendo de la habitación.

Maeve inflo sus mejillas decepcionada, pero fue a su maleta a buscar ropa para ponerse algo bonito para la ocasión hoy conocería a su prima y su abuela dio saltitos emocionada al pensarlo. Cuando termino la llamada salieron del hotel y tomaron el autobús para ir a santa fe donde habitaba la abuela.

Al llegar tomaron un taxi para acercarse al pueblo – papá ¿crees que le agrade a Mia? – se podía ver a distancia la casita de su abuela era pequeña y con un gran patio lleno de flores.

- Por supuesto que sí, solo es un año menor, estoy seguro que se llevaran muy bien – explico sonriendo cuando llegaron vio a su abuela esperándolos, pero no vio a la niña por ningún lado.

Su papá bajo primero y ella lo siguió energéticamente - hola un gusto en conocerte, ¿te puedo decir abuela? – pregunta en español con un poco de dificultad - perdón si me equivoco aun no domino el español – esta vez paso a ingles tímidamente pero aun sin bajar de la nube de energía.

- Por supuesto amable señorita – hablo educadamente la señora de edad avanzada sonriendo – no te preocupes tu español es verdaderamente impresionante – se notaba en su voz lo impresionada que estaba – Mia esta adentro porque no vas a saludarla – sonrió dándole un beso en la mejilla dejando que se vaya adentro, cuando se fue miro saludo a su sobrino con dos besos en la mejilla y lo ayudo a entrar las maletas.

Maeve con el visto bueno corrió dentro de la casa emocionada por conocer a Mia – Mia holaaa ¿dónde estás? – pregunta emocionada buscando a la niña y la encuentra temblando en una esquina – holaa ¿estabas jugando a las escondidas? – su pregunta salía emocionada hasta que vio que negaba con la cabeza – ¿estas nerviosa? Yo también lo estoy, pero estabas con ganas de conocerte nunca tuve a nadie de mi edad- hablaba emocionada sentándose a su lado.

En algún momento las dos se quedaron dormidas contra la pared comenzando una bonita amistad entre las dos.