𝒜 𝒷𝓁𝒾𝓃𝒹 𝓁𝑜𝓋𝑒 (horangi x lectora)

Inconvenientes.

Estabas saliendo del bar cuando la preocupación invadió tu ser no sabías como te irías a esta hora ya no había ningún transporte que te dejara cerca de tu destino, tuviste que recurrir a marcarle a tu hermana, no podría estarte cayendo mal tu madrugada como ahora tu hermana no contestaba la llamada eso te puso más frustrada de lo que ya estabas, no tuviste más remedio que sentarte en la parada del bus que estaba cerca del bar

pensaste que la mejor opción era sentarte ahí hasta que dieran las 7, hora en que los buses empiezan a circular..., pudiste a ver pedido un taxi o irte caminando pero una mujer por las calles de Inglaterra a media madrugada sola no te parecía algo seguro, así que ahora estabas ahí sentada esperando.

Hasta que escuchaste una voz masculina provenir detrás tuyo, nada podía ir de mal en peor o eso creías tu y es que era él militar de gafas no es que te molestara pero solo que te ponía nerviosa su sola mirada y ahora hablarte te hacía derretirte por completo, en realidad no tenías tanta experiencia con los hombres eso te ponía como niña de secundaria y más si un hombre de esa talla y rango se te acercaba

— fui demasiado maleducado en no darte las gracias hace un rato por atendernos a mi equipo y a mi.

— no te preocupes, solo es mi trabajo.

estabas muy nerviosa, apenas podías formular tus palabras

— entiendo, tienes toda la razón señorita pero no solo venia a eso, en realidad se que notaste mis miradas no es así?

— yo... eso es, si las note acaso fueron a propósito que las notara? dijiste con mirada incrédula

— era más que obvio, estoy interesado en ti y quería que lo supieras de una u otra manera...

Eso último te dejo atónita, así que era cierto el hecho que estuviera interesado en ti ni tu misma lo creías, pero tus amigos desde un principio tuvieron la mera razón

— estás esperando el transporte no es así?

— si es solo que...

— a esta hora ninguno pasa, lo sabías? entonces déjame llevarte a casa.

El hombre dijo seguro y con ojos entrecerrados, suponías que tras ese pasamontañas tenía una sonrisa o quién sabe, no te quedaba otra opción que aceptar el aventon que te estaba ofreciendo aparté no tenías más opción y para ser realista que mierda harías a tal hora, esperar que te asaltarán? te paraste del asiento de la parada y decidida, aparte de alguna manera el hombre también te intereso y te transmitía confianza

— realmente no quiero causar inconvenientes pero tampoco me quedan otras opciones, así que no esta mal si me llevas a mi casa por esta vez.

— ningún inconveniente linda, tampoco es bueno que una chica esta sola aquí en este lugar

El hombre te dijo que lo siguieras su carro estaba cerca, así que lo seguiste y dios si que le quedaba a su altura aquel carro era un carro deportivo demasiado llamativo de color negro, el hombre te abrió la puerta del carro a lo que accediste a subir y el subió después de ti, arrancó hacía la dirección que le diste ahora más que nunca sentías vergüenza y demasiada timidez no sabías que hacer si sacarle algo de plática lo único que se escuchaba era el airé acondicionado del carro y el volante, cuando volteaste a ver el volante observaste sus manos no te diste ni la más minima cuenta en el momento en que se deshizo de sus guantes tácticos cafes que llevaba puestos anteriormente

joder pensaste en tus adentros cuando te diste cuenta que sus manos eran grandes y marcadas de venas al igual que sus brazos eran tan marcados, blancos y con venas gruesas, por un momento llego a tus pensamientos que no podría hacer con esas manos, así estuviste unos minutos observando su cuerpo esbelto y muy bien trabajado, "mierda" dijiste en tus pensamientos recapacitaste que estabas casi comiéndotelo con la mirada y teniendo imaginaciones que no deberías, caíste en cuenta de ello y te hizo sentir mal y apenada por pensar eso cuando él te ofreció llevarte a tu casa con buenas intenciones.

— vamos sígueme viendo, también disfruto que me veas o a caso piensas que no me daría cuento de ello.

El hombre emitió una risa algo ronca y varonil, te miro de reojo iba centrado manejando pero no era un obstáculo para no darte miradas a cada rato

— lo siento, no quise mirarlo de esa forma.

Bajaste tu mirada a tus manos que estaban sudando por la vergüenza qué habías pasado pero tenías que matar la tensión que emergía del auto en marcha

— podría saber su nombre? preguntaste curiosa al hombre

— dime horangi, pero mejor dime el tuyo linda...

— me llamo _______ un nombre común je.

— un lindo nombre para una bella mujer

Dijo horangi guiñándote un ojo recargando su cabeza con sus manos en el volante, no te habías dado cuenta que ya estaban enfrente del edificio en el que vivías hasta que el hombre habló, y se bajo del asiento de chofer para ir abrirte la puerta del auto, bajaste dándole una sonrisa tímida el te acompaño hasta el edificio, empezaste a buscar las llaves en tu bolso pero ooh mierda no estaban y tampoco recuerdas dejarlas en el bar estabas segura que las habías metido en tu bolso.

no tuviste más remedio que llamarle a tu hermana de nuevo, esta vez si te contesto

"hola oye estas en casa? no tengo llaves puedes bajar abrirme? si hermanita"

"_______ que carajo no estoy en casa en la mañana te mencione que estaría en casa de mi novio"

"joder lo olvidé, esta bien veré que hago, adios y gracias por nada agnes"

no sabías que hacer, lo raro es que horangi estaba esperando que ingresaras a tu departamento, pensaste que noto que habías perdido tus llaves y más con esa cara de estrés que llevabas y ahora tenías un problema más que resolver, se acerco a ti y te dijo que podías ir a su casa que quedaba cerca y  estarás ahí mientras amanecía

— mi casa queda cerca tampoco me quedare ahí mucho rato ya que tengo que ir a la base, así que puedes descansar en lo que se hace de día.

— mierda no quiero volver a causarte un inconveniente.

El hombre hecho a reír y te dijo que no había ningún problema solo no quería que estuvieras pasando por momentos así, y bueno ahora estabas en su casa.... una casa demasiado cómoda y linda
lujosa más que nada, te sorprendió que un hombre ocupado como el tuviera una casa como esta, es obvio que los militares ganan demasiado pero una casa muy acogedora para tu gusto hasta podrías pensar que ya habías estado aquí.