Shinso Hitoshi One shots

eye contact

Este es un pedido de nishax_x

Esta historia la narra shinso.

Ojalá les guste.

__________

El viento silbaba, entre las grietas de una ventana trizada, ahogado por los gritos desesperados de los civiles y el retumbante sonido de una injusta batalla.
Esa tarde, que hace unos instantes era serena, se había convertido en un caos completo. La razón de esto era un grupo de tipejos, para nada amenazantes, asaltando un banco. Por algun motivo que desconozco, mi agencia pensó que podía encargarme solo, pero estaban armados y tenían rehenes, y aunque yo tenia un don muy útil para estas situaciones y era un héroe profesional, el lavado de cerebro solo funciona si la otra persona está con la guardia baja, y todos ellos estaban muy conscientes.

Estaba rodeado por tres idiotas con revólveres y un cuarto que apuntaba directamente a un pequeño niño, de más o menos cinco años, que temblaba por el miedo y estaba a punto de romper en llanto.

Mi cerebro intentaba procesar la información y encontrar una solución cuando de repente la ventana trizada exploto y de entre vidrios rotos emergió una chica. Vestía un traje morado y negro, al cuerpo, con muchos compartimientos para armas, una máscara que cubría la parte inferior de su rostro, dejando visibles sólo sus ojos, y una daga en la mano, que parecía realmente afilada.
Ella miró la escena con detenimiento y por un segundo sus ojos se cruzaron con los míos, en ese pequeño instante pude notar la profundidad de su mirada, era como si pudiera ver a través de mi, directo a mi alma, como si me leyera atentamente y me comprendiera en mi totalidad.

En ese momento uno de los asaltantes le dirigió el arma y apretó el gatillo, disparando una bala que se dirigía a su frente, pero antes de que pueda siquiera tocarla ella cambió de posición, esquivandola y haciendo que impacte en la pared.
Era prácticamente imposible, nadie era capaz de esquivar balas. En ese momento comprendí que ella era más compleja de lo que pensé.

Se libró un tiroteo en contra de la desconocida, pero todas las balas acabaron unididas en el la firmeza de las paredes, ni una en su cuerpo.

Ella se acercó con calma, miró al niño con la pistola en la nuca y dirigió su desaprobación al atacante. Con sus ojos fijos en el arma, con su atención en el gatillo. Hubo un disparo, el arma callo al piso y se deslizó unos centímetros antes de escuchar un golpe seco, un estruendo retumbante que desvío la atención de todos, un cuerpo sobre el suelo, rodeado por un charco escarlata y un olor metálico. Grande y robusto, tendido en el suelo, se encontraba el cuerpo del atacante, con una daga en el corazón.

El pequeño infante se escondía tras la definida figura de la señorita, con los ojos cubiertos, con espasmos de terror.

La chica me miró, pero no fue una mirada concidente, fue bien dirigida, y con un desvío de sus ojos entendí su idea, atrape con mi control mental a los otros tres ladrones y los obligue a atarse entre sí.

Concluida la misión, llame a la policia, para que se llevara a los criminales, pero de forma paralela se acercó a mi, con el niño.

- ¿puedes hacerte cargo? - pregunto entregandome al menor.

- si, muchas gracias. -

Ella solo asintió una vez y se subio a una de las ventanas rotas, movió su mano en señal de despedida y salto, abandonando la escena. Era la primera vez que veía a un vigilante involucrarse de forma tan directa en una misión. En realidad, era la primera vez que veía a un vigilante en acción, y era increíblemente buena luchando.

♡

Los días posteriores a esa tarde pensé muchas veces en esos ojos.
¿que clase de poder poseerán?
¿Porque cuando me miró me sentí desprotegido, desnudo, abierto?
Preguntas que revoloteaban en mi mente como polillas, comiéndose las hebras de mi cordura.
Parecía un misterio, un peligroso misterio, porque si alguien como yo se sintió débil ante esa mirada, debía serlo.
Por otro lado, su voz era tan dulce que parecía difícil la posibilidad de que sea peligrosa. aunque no dijo más de tres palabras, podía recordar perfectamente el movimiento de sus finos labios, y como el aire salía suspirando la "s".