20.

558 102 147
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.







𝘿𝙖𝙗𝙖 𝙫𝙪𝙚𝙡𝙩𝙖𝙨 𝙮 𝙫𝙪𝙚𝙡𝙩𝙖𝙨 𝙢𝙞 𝙘𝙖𝙗𝙚𝙯𝙖 respecto a la última conversación que tuve con Seungwan estando aquí en mi oficina.

Y es que sí, la nube perfecta luego de la cita que tuve con Soohyun se reventó tan pronto como tuve que volver al trabajo esta mañana y era momento de buscar respuestas respecto al futuro de esta compañía, que lastimosamente no tenía algo certero.

—¿Cree que usted quede al mando, señor?

—Es lo que me había dicho él, Hoseok. Cuando sucedió todo esto me comuniqué de inmediato con el abogado de la familia preguntando si papá había dejado alguna carta rectificando lo que él me había pedido días antes a su muerte. — expliqué juntando mis manos. — él me respondió que están haciendo todo para buscar respuestas, ya sabes, algún testamento que él pudo haber dejado o algo por el estilo.

—¿Cree que la señorita Jihee se interponga en esto?

—No debería, pero la conozco. — me encogí se hombros, frotando mis sienes. — es un dolor en el culo, de verdad que esta vez espero que ella de un paso al costado.

—Yo realmente espero que usted quede a cargo. Ella nos hará la vida a cuadros.

Luego de la muerte de papá ella había desaparecido del radar, justificándose con que necesitaba un nuevo aire para poder vivir la vida sin su padre. Por la misma razón todo se mantenía en un pulcro orden por estos lados, sin embargo, sé que ella volverá y no se quedará de brazos cruzados, en definitiva no es algo que a Jeon Jihee le guste.

Ella luchará por esto y por lo mismo debía tener mi jugada antes de que ataque.

—Créeme que estoy poniendo todo mi esfuerzo. — tiré mi cabeza hacia atrás, sintiendo como comenzaba a doler de tan solo pensar en aquella situación. — ahora, ¿me puedes dejar un momento a solas? Necesito hacer una llamada, por favor.

Tan pronto como pronuncié tales palabras, la mirada de Hoseok cambió drásticamente. Ahora sus ojos tenían una pisca sugestiva, tan divertida que quise golpear su bonito rostro.

—Por supuesto, señor. Sus deseos son órdenes. — guiñó un ojo para soltar una risa divertida. — ¿Le doy un consejo?

—No, gracias...

—No sea tan insistente. — me ignoró olímpicamente. — deje que ella lo extrañe, que tenga la iniciativa de comunicarse con usted.

Escuché sus palabras, aunque no respondí. En cambio, hice una señal con mi mano para que de una vez por todas saliera de mi oficina antes de que le lanzara cualquier objeto para que borrara de una vez por todas aquel rostro burlón.

Me quedé observando el celular un par de minutos, quizás considerando las palabras de mi secretario. Soohyun me había dado su número anoche luego de pedírselo, entonces si yo quise tanto algo luego de todo este tiempo, ¿por qué me voy a privar de algo tan simple por consejos idiotas?

✶ Seven Reasons Why ✶   ☾JJK ☽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora