Despedida...

226 23 1
                                    

Desde la primera vez que se entregaron, sus encuentros ya eran frecuentes. Pero este sería su último encuentro, ya que la castaña entraría en la universidad en unos días, y sus padres ya habían decidido que se iría a Londres, por lo que tendría que despedirse pronto.

Allí estaban en el mismo lugar donde habían compartido caricias, besos, y sus momentos más íntimos y apasionados.

Donde hacían el amor cada vez que necesitaban estar cerca, ese era su lugar especial. Hoy habían vuelto a hacer el amor, sin Jeong darse cuenta seriamente de que esta sería su última vez con ella.

Nayeon estaba acostada sobre el pecho de la pelinegra mientras está tenía su mano en la espalda de ella. Su mano subía y bajaba haciendo suaves caricias sobre esa piel suave y lechosa.

La castaña se agitó un poco tratando de salir de esos brazos para poder levantarse.

"¿A dónde vas?", preguntó, mirando a la castaña. Está rápidamente le dio una media sonrisa.

"Tengo que decirte algo muy importante", respondió con suavidad.

"Pero quédate aquí conmigo, por favor" La jaló suavemente hacia ella haciéndola acostarse de nuevo sobre su pecho. "Dímelo, pero quédate aquí", pidió.

"Está bien, solo porque a mí también me gusta tenerte cerca", sonrío dulcemente.

Nayeon volvió a sentir su aroma y calidez cuando se dejó cear en sus brazos. Luego sonrío y beso el pecho desnudo de su amada.

"Mmm... Me amas y me necesitas, ¿no es así?", susurró la pelinegra y preguntó somnolienta mientras trataba de no quedarse dormida.

Nayeon la observa mientras trata de no quedarse dormida también, pero esas palabras la hicieron querer morir, porque eran ciertas. No sabía si sobreviviría estando lejos de ella, pero tomó fuerzas y le contó lo que tanto le había ocultado durante estos meses.

"Jeongie, esta será nuestra última vez", confesó.

Su corazón comenzó a doler mientras soltaba su confesión. La pelinegra, aunque tenía los ojos cerrados, escuchó perfectamente.

Sus sentidos se despertaron de repente y la miró.

"¿Cómo, de qué estás hablando, Nay?"

Las dos se miraron ahora y ella respondió.

"Iré a la universidad en unos días, es mejor si voy a Londres"

"¡No!", sacudió la cabeza también. "Has vuelto solo un par de meses", comenzó a sentir un gran vacío en el pecho, no otra vez, no quería que se fuera.

Nayeon es el amor de su vida, no podía dejarla ir.

"Lo sé, pero mis padres han decidido qué es mejor para mí, irme el miércoles. Esto es para nuestro futuro, recuerdas...", susurró hasta las lágrimas.

Hace mucho tiempo habían hecho una promesa, en la que dijeron que estarían juntas, se casarían y tendrían su propia familia, su propia casa. Y vivirán su amor sin secretos y libre.

"No, no, no, por favor no te vayas... Te necesito", tomó sus manos con cuidado mientras se miraban a los ojos con desesperación.

"Yo también, pero recuerda que es para nuestro futuro y si realmente me amas tienes que dejarme ir, Jeongie... Es mi sueño y tú lo sabes", la miró con tristeza.

Los ojos de Jeongyeon lloraban, su corazón se hundía cada vez más profundamente. No lo quería, no quería dejarla ir, pero tenía que hacerlo. Suspiró antes de hablar.

𝐒𝐔𝐂𝐇 𝐀 𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄 ➯ ᒾʏᴇᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora