Capítulo 4

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Wooyoung.

No tenía ni la menor idea de porque San decidió acompañarme a mi habitación, pero aquí estaba y no podía echarlo.

En serio no podía, él al lado mío era similar a un edificio.

Al abrir la puerta, nos encontramos con mi lugar seguro, mi cueva, el sitio en el que vivo encerrado jugando videojuegos, haciendo tareas y leyendo libros.

_Perdón por el desorden _Me disculpo juntando algunas prendas de ropa del suelo.

Bueno, en mi defensa, ¿cómo iba a adivinar que el chico más popular de la escuela visitaría mi ordinaria habitación?

San visualizó la minúscula habitación con una ceja enarcada, probablemente pensado que la mejor palabra para definirla es humilde si no quería tener que llamarla pobre.

El padre de San era reconocido por ser el CEO de una importante empresa aquí en Seúl así que sí, mi casa al lado de la suya debía parecer un basurero.

_Tienes muchos libros _Comentó ojeando la pequeña biblioteca en un extremo.

_Sólo algunos, son pocos _Me encogí de hombros y acomodé mis lentes encima de mi nariz de manera inconsciente.

_Los únicos libros que tengo son los de la escuela _Rie entre dientes llevando sus manos a los bolsillos de sus pantalones de mezclilla. Miré su camiseta blanca y holgada y también sus botas estilo militar.

Me gustaba mucho el estilo de San que podría definirse como casual, aunque si yo tuviera sus músculos usaría algo que los hiciera resaltar.

Pero lamentablemente yo, no tenía nada que presumir.

_Parece que alguien ha estado en Instagram _San se agacha a la altura de mi computador con una ancha sonrisa.

En ese momento, doy un respingo y me adelanto a quitar las fotos que se veían en la pantalla.

_L_lo siento, no sé suponía que debías ver eso.

San desliza su mano por su largo cabello azabache y no me pierdo ningún movimiento de ese gesto.

_¿Esa era Hyunjin? ¿La chica de segundo?

_S-sí, pero sólo entré a su perfil de casualidad _Tartamudeó aunque no importaba lo que dijera, ya había sido descubierto por alguien de su círculo social.

Eso me pasa por ser tan descuidado.

¡Soy un imbécil!

Ahora San se los dirá a todos, los estudiantes se burlarán de mi estúpido enamoramiento por la chica más linda de la escuela y yo moriré.

_No me mientas _San chasquea su lengua_ Te gusta, ¿no?

Abro y cierro mi boca como un pescado sin saber que responder.

Después de darle mil vueltas al asunto, decido suspirar resignado.

_Sí, desde hace dos años _Confiezo con voz baja y jugando con el borde de mi chaleco_ ,p-pero sé que ella no está a mi alcance, no hace falta que me lo digas.

_¿Por qué es hermosa y popular y tú un don nadie?

_Prefería decir que somos de mundos diferentes, pero gracias por bajarme aún más el autoestima _Expresé sarcástico mostrándole el pulgar_ No importa, cuando nos graduemos y sea un exitoso ingeniero la buscaré y me casaré con ella _Afirmo con ensoñación.

_O podrías tener sexo con ella en una fiesta _Sugiere el deportista como si todos los adolescentes fuéramos bendecidos estéticamente al igual que él.

_¿Estás loco? ¡Yo no sé nada de eso! _Agito mis manos.

San suelta una carcajada.

¿Qué le parecía tan gracioso?

_Dios, ¿siquiera has besado a alguien alguna vez? _Preguntó con un tono burlón.

Sentí como mis mejillas se calentaban cada vez más.

_Una vez en cuarto grado compartí una paleta con una niña.

_Eso es lo más triste que he oído _Volvió a reír.

Quería decirle que lamentaba no ser un deportista rico, guapo y mimado al igual que él, no obstante, creo más conveniente quedarme callado.

Mi rostro no ansiaba tener el puño de San sobre el así que debía cuidar mis palabras.

_¿Y de dónde se supone que saque experiencia?

_¿Podrías dejar de lloriquear? Te enseñaré todo lo que tienes que saber del sexo y tienes suerte de que también follé con Hyunjin y sé lo que le gusta en la cama _Presumió arrogante.

Maldito promiscuo, lo admiraba tanto.

_¿Eso debería hacerme sentir bien? Para ti es tan fácil tener a la chica que quieres a tus pies _Mascullé.

_No sólo a las chicas _Dijo más para sii mismo.

_¿Qué? _Fruncí el ceño.

_Olvídalo _Hizo un gesto con la mano.

_¿Y c-como me enseñarás? _Inquirí jugando con mis manos.

A penas hice aquella pregunta San elevó las comisuras de sus labios y se dirigió a la puerta.

Lo que menos esperé que hiciera sucedió: cerró la puerta con seguro.

_Sólo hay una forma _Dio un paso y luego otro, hasta quedar frente a mí_ Con la práctica _Tomó mis manos y con estas rodeó su diminuta cintura.

San envolvió sus brazos en mi cuello, el aroma a la colonia que usaba invadió mis fosas nasales.

Sin embargo, lo que más lamentaba era que su muslo rozaba el bulto que sobresalía de mi pantalón.

Eso era lo malo de tenerlo tan grande.

_¿Q-qué en serio me besarás? ¿No te da asco?

Pobre San, ¿en serio se animaría a enseñarme a besar solo para ayudarme?

Estaba realmente equivocado con él, San era buena persona.

_Un poco, pero haremos el sacrificio. Sólo imagina que soy Hyunjin, ¿bien?

Asentí y le apreté la cintura con más fuerza. Bueno, no iba a ser tan difícil, San tenía bastantes curvas para ser un chico.

Pero tenía una duda.

_¿Y tú en quien pensarás? _Incliné mi cabeza a un lado.

San sonrió e ignoró mi pregunta antes de unir su boca con la mía en un beso desesperado.

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