Los dormitorios de tercero no eran un lugar agradable para los recuerdos de Itadori, Honestamente, los evitaba mientras podía la mayor parte del tiempo que no tenía que ir a despertar a Hakari o a Kirara. Simplemente había muchos recuerdos ahí.
Entonces, tener solo los dormitorios de tercero para quedarse en su estadia de este mundo, que no era el suyo, provocaba algo de incomodidad en su estomago, un nudo en su garganta y un sentimentalismo molesto que trataba de apartar con todas sus fuerzas. De nada le servía quedarse atascado en el pasado, los muertos no iban a regresar solo por pensar en ellos.
"Megumi, Satoru, Suguru, Yuta, Panda, Toge, de este lado conmigo. Nanako, Mimiko, Maki, Shoko, con Utahime-senpai" Itadori les dio las indicaciones para separarlos por grupo.
Erase una vez, en los dormitorios de primero en su propio mundo, hubo tres alumnos. En segundo solo quedaron dos y en tercero, en tercero quedo solo uno para cargar con los recuerdos de quienes lo dejaron atras.
Los dormitorios de tercer año eran un recordatorio de lo solo que se quedo Yuuji en la escuela.
Megumi y Tsumiki, quienes fueron acogidos en su segundo año, después del incidente de Toji, con ayuda de Tsukumo-sensei. Se quedaron en un apartamento de Tsukumo en el centro de Tokio, inscritos a una nueva escuela y con sus gastos cubiertos por el dinero de Itadori en sus misiones.
Las gemelas Hasaba llegaron al año siguiente, antes de la muerte [Asesinato, asesinato] de Kugisaki y Junpei. Ellas también se quedaron en el apartamento, de tal forma que los dormitorios estaban solos, solo para él y nadie mas. Nanami se quedaba en los de segundo año, como le correspondía, pero había días que los dos se quedaban a dormir en la sala común solo para que la soledad no se los tragara.
Y luego Tsukumo-
Y luego Itadori se graduó, heredo los bienes de Tsukumo que no sabía que ella le había dejado, heredo los bienes de su abuelo muerto hace mucho tiempo, logro eliminar a Sukuna incluso si eso le dejo secuelas. Las cosas mejoraron, un poco.
"Sensei" Satoru lo llamo de repente con preocupación, un inusual tono de voz en él "¿Esta bien?
"Por supuesto, Satoru" Para su crédito, solo tardo medio segundo en contestar.
Notoriamente, Satoru noto de inmediato que Itadori no pregunto '¿Por qué piensas eso?' como solía hacer.
"Estaran acomodados de este lado, espero que esto sea temporal y pase pronto, pero Tengen todavía tiene que regresar y contar a que conclusiones han llegado" Les informo viendo que habitaciones tomaban.
"¿Donde te quedaras, sensei?" Le pregunto Suguru.
"¿Mm? Escojan ustedes, elegire la que quede" Lo penso un segundo "Satoru, solo no escojas la que esta cerca del dormitorio de las chicas"
"Sensei, me duele totalmente tu desconfianza en mi, no hay mucho que ver ahí"
"Nada que te interese" Suguru tosió falsamente detras de su puño.
"Salmon"
"¿Dijiste algo, Suguru?" Satoru se giro hacia él para mirarlo con una sonrisa demasiado tensa, ignorando a Toge porque no podía tener discusiones con su compañero de clases como quisiera "Porque yo no soy el pervertido que se queda de mas en los vestuarios después de una misión"
"Yo no soy el que guarda los lentes que cierta persona le regalo como si fueran el regalo mas sagrado del mundo"
Yuuta mantuvo una sonrisa incomoda en su rostro, mientras los otros dos hechiceros de grado especial discutían entre ellos. En su lugar, miro a Itadori y señalo con un dedo una de las puertas "Tomare esta, sensei"
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Del otro lado del paraíso [JJK].
FanfictionDentro del almacen de Tengen se encuentra un viejo marco de madera, Una puerta a otro mundo. Un objeto que no había visto la luz en siglos, ni siquiera algo que la maldición que se lo llevo se dio cuenta hasta que estuvo fuera y lo dejo tirado en me...