Insaciable

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Para Aemond el día ya había comenzado, fue al gimnasio como todos los días y ya estaba listo para ir a su oficina a ver la evolución de la herida de su sobrino a medio día, sin embargo una llamada en su móvil lo interrumpió en el camino a la clínica.

-Rhae?  

- Hermanito, como te encuentras?

- Muy bien, y tu?

- Bien, gracias

- Algún motivo de la llamada?

- Quería ver si tendrías algún tiempo disponible para ir a ver a Luke, me ha llamado y esta enfermo

- Creo que tengo un espacio disponible ahora mismo

-  Gracias hermano

- De nada Nyra

Fin de la llamada 

En el trayecto a la universidad de Luke se preguntaba incontables veces si se encontraría grave, se preocupo mucho al ver su rostro esperando en la enfermería cuando llegó. Una de las secretarias de allí le habló de repente.

- El estudiante Velaryon se encuentra allí, con mucha fiebre - dijo la señora mientras apuntaba una sala adornada solo de blanco. Dejó a la señora para ir hasta la enfermería, allí se encontró con Luke quien tenía un rostro de dolor y malestar terrible, cerró la puerta tras sus espaldas y fue a la  camilla para asegurarse de su mal estado.

- Te encuentras bien Luke?

- Me siento de maravillas - 

- Lucerys, estas enfermo-

El castaño esbozo una gran sonrisa ladina mientras se incorporaba en la camilla de manera sugerente y caminaba hacia su tío, al parecer vivía incitándolo a tomar malas decisiones por el deseo.

- No sabes lo preocupada que estaba tu madre cuando llamó -

- quieres que nos descubra Alicent? - Dijo Lucerys, a lo que le respondió con un gruñido por que tenía la razón, otra vez. El castaño tomó las frías manos de su tío sin embargo el contacto no duró mucho, porque el mismo retiró sus manos para verificar el tiempo restante.

- Tengo tres llamadas perdidas de Papá, espérame  un minuto 

 Llamada *

- Daemon?

- Luke, debes venir ahora mismo a casa !- Su voz se oía temblorosa algo extremadamente raro para alguien como su padre

- Es muy urgente?  

- Tu madre esta sufriendo una paro cardiorrespiratorio - la voz de Daemon se escuchaba asustada como cuando a la muerte llevó a su bisabuelo Baelon. No se contuvo y se hecho a llorar cual niño pequeño, colgó la llamada rápidamente para empezar a ordenar todas sus cosas mientras Aemond lo miraba con una notable preocupación en el rostro.

- Que ha pasado? 

- Es mi madre, esta teniendo un paro cardiorrespiratorio -

Así es como inmediatamente subieron al Porsche negro y se dirigieron hasta la fortaleza por medio de una gran velocidad. En el trayecto Aemond se mostraba con los nervios a flor de piel y aunque no se viera a simple vista lo demostraba cuando jugueteaba con sus manos en el volante  o cuando enrollaba mechones de cabello en su dedo nunca se había visto a alguien tan sereno como Aemond con este nivel de estrés. En el momento de bajarse del vehículo Daemon corrió hacia ellos desaforado.

- Aemond has algo por favor! - Daemon nunca había rogado a nadie en su vida y en ese momento dejó todo su orgullo de lado con lágrimas en los ojos y sosteniendo el rostro de su sobrino en sus manos temblorosas. Su tío llegó hasta el cuarto de Rhaenyra y le practicó reanimación de partida no funcionó y la ambulancia ya había llegado al palacio para trasladarla a la clínica del platinado donde irían solo sus hermanos y sus hijos junto a Daemon, allí les informaron que tendría que ser sometida a una operación de último minuto por lo que Luke, sus hermanos y sus tíos se dirigieron hasta allí para aguardar en los asientos de afuera pero Aemond ingresó a la sala aproximadamente cuatro horas, a fuera de la sala de la cirugía todos eran consumidos por los nervios cuando por la puerta apareció Larys, su rostro no mostraba expresión alguna.

- Mis príncipes, su madre y hermana ha fallecido, les deseo mis mas sinceras condolencias. 

Todos allí estaban procesando los hechos con lágrimas desconsoladas, nunca había visto llorar a Helaena y Aegon, mucho menos a Daeron sin embargo cuando Larys terminó su reverencia con intención de irse Daemon lo tomó firmemente de la bata quirúrgica  y lo estampó en la pared.

- Dime que no es verdad! - 

- Mi príncipe... yo no podría jugar con algo así 

Daemon abofeteó su rostro con rabia y luego, en un abrir y cerrar de ojos toda esa ira se transformó en tristeza que no dudó en demostrar cuando se dejó caer en uno de los asientos que pertenecían al establecimiento lamentándose y creando un bucle en su mente con el nombre de su madre. Aquella noche nadie durmió, Jace y Daemon gestionaron los servicios funerales por toda la madrugada, sin duda lo harían como todos sus antepasados, la cremarían en una pira funeraria, Mientras el y Aemond cuidaban de los pequeños Aegon y Viserys para   poder asistir a la ceremonia que se realizaría a medio día. Ya todo estaba listo solo faltaba que la Guardia Real los trasladara hasta Dragonstone, allí donde la princesa había pasado la mayoría de su vida compartiendo con sus hijos.

- Lucerys - La voz de su padre todavía sonaba ahogada por el llanto

- Si? 

- No dejes de parecerte a tu madre

Eso fue lo único que Daemond dijo antes de subir al vehículo que los trasladaría hasta su destino. Por supuesto los canales de prensa no podían faltar, bombardeando a Jacaerys sobre preguntas como cuando sucedería el Trono de Hierro y sobre su próximo Reinado.

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⏰ Última actualización: Mar 03 ⏰

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Amor a primera cirugía  - Lucemond-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora