Capítulo 3

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Susan caminaba bajo la luz de la luna por las calles de New York reflexionando sobre su relación si enserio valía la pena seguir con Reed ella lo amaba mucho pero el no parecía reflejar el mismo deseo y amor por ella, en estos momentos desea hablar con su amiga Janet también conocida como la avispa miembro de los vengadores los héroes más poderosos del planeta pero su equipo y ella habían salido a resolver una situación en la prisión conocida como el cubo. Pensar en todo esto solo iso que Susan soltara un suspiro de frustración, siguió caminando hasta que un delicioso y familiar olor llegó a su nariz al buscar de donde venía ese olor pudo ver que estaba enfrente de la estrella de New York, había estado concentrada tanto en sus pensamientos que no se había dado cuenta de lo mucho que había caminado. Sin saber que más hacer entro a la cafetería su nariz fue bombardeada por deliciosos aromas desde el dulce aroma del pay de manzana hasta el fuerte aroma del café exprés, sin más tomo ha ciento en la misma mesa de ayer alejada de todas las demás.

-Es bueno verla de nuevo.

Dijo aquel chico Dan el cual sonrió a ver a Susan otra vez en la cafetería.

-Gracias...

Dijo Susan intentando fingir que estaba bien.

-Desea ver la carta?.

Pregunto el chico mostrando de nueva cuenta una sonrisa.

-No... Solo quiero una taza de té de limón.

Dijo Susan evitando mirar mucho al chico ya que intentaba ocultar su tristeza.

-Enseguida.

Dijo servicialmente el chico mientras que se retiraba aun que noto lo triste que estaba aquella mujer, mientras esperaba su pedido Susan miraba la ventana que estaba a su lado por la cual veía pasar alguna personas y autos lo que llamo su atención fue una joven pareja por su edad y las mochilas que llevaban en sus espaldas parecían ser estudiantes de universidad sentía celos de la chica ya que podía estar con su chico.

-(Tranquilizate Susan no seas dramática).

Pensó Susan mientras sentía vergüenza por sentir celos de una chica siendo ella una mujer cerca de los treinta.

-Aquí tiene.

La voz de Dan saco a Susan de sus pensamientos, como la vez anterior el chico no trajo solo la taza de té si no que esta vez trajo una rebanada de pastel de fresa.

-Eh? Pero yo no pedí pastel.

Dijo Susan extrañada de que el chico había repetido esta acción una segunda vez ya que pensó que lo había hecho anteriormente por ser una cliente nueva o algo parecido.

-Lo siento por meterme en su vida pero... Note que estaba triste y algo decaída así que pensé que algo de pastel le ayudaría a alegar un poco su día, como decía mi abuela no hay nada mejor para levantar los ánimos que algo de pastel.

Dijo Dan mientras sonreía.

-Muchas gracias Dan.

Dijo Susan mientras le regresaba una pequeña sonrisa aseptando el pequeño regalo de aquel joven mesero.

-No hay de que si necesita algo más no dude en llamarme.

Dijo Dan para después retirarse al mostrador de la cafetería.

-Quien es ella?.

Pregunto una chica que también trabajaba como mesera, de cabello castaño piel blanca y de buen físico (pero no tanto como susan) era ella Marín la ex de Dan.

-No debo darte explicaciones Marín mejor ponte a trabajar.

Dijo Dan controlando el tono de su voz mientras señalaba a una pareja que acababa de entrar.

YO AMO A LA MUJER INVISIBLE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora