Capitulo 4: Café y donas

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Capitulo 4: Café y donas

Con la edad que cargaba y las experiencias vividas, sin sumarle los acontecimientos desde que era Iron Man, Tony Stark creía que ya nada lo podría sorprender en la vida. No obstante, fue sorprendido por nada más ni nada menos que el Capitán América. Y no, no era por la petición del mismo de aprender a besar y demás, sino como llevo a cabo la clase de besos el superhéroe. Decir que Steven Rogers hacia devorado su boca era lo más acertado, el hombre no solo era un buen estudiante, era muy vigoroso a la hora de la práctica, así como también curioso. No habían pasado de los besos, pero vaya que el entrenamiento de labios fue largo, para ser sinceros, Tony, debía admitir que extrañaba tener sesiones de besos tan extensas, aunque no admitiría jamás frente al principiante que disfruto de ellos.

Una vez que el Capitán disfruto saborear cada glaseado de las seis donas diferentes de los labios de Tony, la clase continuo con leve indicaciones de Tony al finalizar cada beso, tales como: "mantén una respiración controlada y tranquila" o "no hagas movimientos bruscos con la cabeza, se lento, pero confiado".

Terminaron con una devolución general de Tony en cuanto al desempeño de Steven. En esta, Tony le indico que no lo había hecho mal, pero obviamente siempre se podía mejorar, sobre todo en el movimiento de labios y el temblor de los mismos. Tony, mientras hablaba, estuvo esperando al menos ver un sonrojo en el rostro de Steven, pero nada de eso se mostro en el hombre, Tony solo tuvo indicios de nerviosismo por el temblar de los labios, ya que por lo demás el Capitán controlaba a la perfección sus emociones, podría decirse que el hielo le había enseñado ser uno por fuera, porque Tony detecto en ese temblar de labios que era una montaña rusa de emociones vibrantes dentro Steven Rogers.

Trascurriendo unos días, bastante agitados, desde la clase de besos, Tony finalmente pudo pasar su día entero en el taller. Se encontraba en medio de aquel día, uniendo circuitos y demás, mientras Jarvis organizaba su agenda buscando el tiempo para la clase 2, que como le informo a Steven, trataba de besos con lengua, pero que a la vez era una oportunidad para que continuara practicando los besos, sus movimientos, limando los detalles y sumándole la lengua, entre otras cosas.

—No, no, Jarvis, mañana quiero poder dormir hasta media tarde o más, dependiendo la hora en que me acueste. Pepper prometió que no me molestaría con la empresa mañana.

—Mi recomendación, Señor, es que se lleve a cabo hoy la clase. De otra manera, tendrá que despertar temprano mañana, ya que al dio siguiente si debe asistir a las juntas con la señorita Potts.

— ¿Y después de eso?

—Según la agenda del Señor Rogers, debe asistir a una misión de S.H.I.E.L.D.

— ¿Y cuanto dura la bendita misión?

—Es información clasificada, ¿quiere que le pregunte al señor Rogers si puedo decirla?

—No, pero supongo que o mucho o poco, seria alargar mucho este tema. Bien, prográmalo para hoy, después de la cena, infórmale a Steve... y que se lave los dientes antes de bajar acá.

—En seguida señor—pasaron unos segundos—. Señor, el señor Rogers pregunta si desea beber un café y comer donas frescas.

—Claro, ¿por qué no? Ábrele la puerta.

—Señor, el señor Rogers informa que no bajara con café, tendrá que subir para ello.

—Maldito momento en que abrí mi bocota—suspiró—. Solo dile que no tengo hambre.

—Como ordene.

—Y ya no molestes.

—Señor...

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