01 - 𝐬𝐭𝐨𝐩

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𝟎𝟏

Habíamos ido a un boliche con mi novio y dos amigos suyos

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Habíamos ido a un boliche con mi novio y dos amigos suyos. ¿El problema? que no lo encuentro. Llevo aproximadamente media hora buscando a Agustín. Revisé los baños y revisé tres veces alrededor de la gente, había buscado hasta en la cochera. Pero no había rastro de él, no estaba en ningún lado. Y ya me había hecho esto más de una vez, pero hoy no estaba de humor. Quería irme y Agustín desaparecía de la nada.

Subí unas escaleras que estaban semi escondidas, y quedé en la mitad del camino, cuando lo ví. Agustín estaba arrinconando contra una de las paredes a una chica cualquiera.

Que hermosa que sos, Flor. Mírame así toda la vida. - Agustín jamás pronunció esas palabras así con él. Jamás. Pero a ella, que recién la conocía. Le repetía lo hermosa que era. Agustín juntó sus labios con la tal Flor. Y en un descuido, su novio lo vio.

— Julián te lo puedo explicar. - Pronunció Agustín.

— No, dejá Agus. Ya explicaste demasiado en este año y medio de relación. - Corrí escaleras abajo y salí del boliche respirando con dificultad. Tenía que escapar, sabía que Agustín lo seguiría para llenarle el dolor con disculpas vacías y promesas que jamás serían cumplidas. Se metió en un callejón para que él no lo encuentre, pero aún así lo escuchaba gritar.

¡Julián! Dale la salí la concha de tu hermana. ¡¿No ves que estaba re tomado?! No lo hice pensando, perdóname. ¡No lo vuelvo a hacer! - Julián tapó su boca, aguantándose el llanto, se dio cuenta de que fue un pelotudo. Se dejó por Agustín tantos años, ser pisoteado por él y que le repita que era un maricon, un exagerado, un inútil.

¡Salí Julián! ¿No ves que todo con vos es un drama constante? Son un exagerado de mierda Julián. Un chupa pija, te haces pero quiero saber cuantas veces me habrás hecho esto vos a mi, hipócrita. - A Julián lo nubló la ira y la bronca, y salió a dar la cara.

— Acá estoy Agustín. Quiero que sepas, que jamás se me cruzo por la cabeza hacerte lo que vos me hiciste. ¡Jamás! Y no, no estoy haciendo drama. ¿Sabes qué pasa? ¡Te encontré cogiendo con otra! Y te da la cara para decirme exagerado a mi. Después de todas las cosas que me decías. Chau Agustin, te podes ir bien a la re concha de tu madre. -

Julián estaba cansado. Comencezó a caminar y con cada paso recuerdos de todo lo que pasaron juntos, se le venían encima como un tsunami. La respiración se le cortaba y supo que iba a tener uno de esos ataques de pánico que hace años no tenía, o bueno que comenzaron de nuevo con la llegada de Agustín.

Alguien se me acercó y estaba seguro que era él. Pero no podía hablar, estaba desconsolado. Subió la cabeza, pero no era Agustin. Un chico morocho, que le sonrió cuando él levanto la vista, lo observaba detenidamente. El chico estaba cubierto en tatuajes. Y Julián no pudo evitar sentir unas mariposas revoloteando su estómago, que jamás había sentido con nadie. No sabía ni cuánto tiempo pasaron mirándose, pero algo en el fondo de su corazón le dijo que el chico que tenía en frente, había sentido exactamente el mismo click que él había sentido.

— Hola, soy Enzo. ¿Estás Bien? - Habló el desconocido. Poniéndose de cuclillas frente a él.

— S-soy Julián. - Dijo con esfuerzo después de tanto llorar. Pero los recuerdos seguían viniendo y el ataque de pánico empeoraba.

— Bueno Juli. Contame cualquier cosa. Háblame de la calle, o contame como sos, como una descripción tuya. - Julián lo miró desentendido, pero después su cerebro comprendió que lo estaba ayudando.

— S-soy Julián, tengo veintidos años. Estudio fotografía, mi color favorito es el rojo y mis amigos me dicen araña.- Y fue ahí cuando Juli se calmó. 

— Gracias eu, posta. -  Agradeció.

— Na, tranqui. No hay problema. - Enzo, lo ayudó a levantarse. — Dale, vení que te llevo a tu casa.

No me dio tiempo a pensar, me tomó de la mano y me guío hasta su auto. — Bueno Juli decime tu dirección. - Habló con esa relajación con la que le había hablado desde que se le acercó. Julián hizo lo que Enzo le pidió, después, se tiró en el asiento y pensó. Pensó en cómo sintió todo y a la vez no sintió nada. Pensó en lo vacío que se sentía, en lo que le esperaba con lo que le dijo a Agustín. Pero al mismo tiempo no le importó nada. Ahora estaba en el auto, y estaba con el chico que lo salvó. Estaba ahogado, pero a la vez, sintió que salió a respirar. Así era la cabeza de Julián. A toda hora, todo el tiempo.
Unas lágrimas escurridizas se le escaparon a pesar de que hizo lo que pudo para que no lo hicieran.

— Juli, no sé qué te pasó, tampoco sé quién sos, pero si hay algo que aprendí, es que todo pasa, el mundo no frena; y con lo poco que hablé con vos, me di cuenta de que seguro, no te merecías nada de lo que te pasó. - Lo que Enzo le había dicho no hizo más que hacer que Julián se desplomará delante de él, temblando y sollozando.

— Me cagaron. El único pibe que me dio bola en mi vida, me cagó. Y me trató para el orto desde el momento uno de la relación. No sabes... Enzo, no sabes las veces que me dijo que era un inútil, un exagerado, un dramático, un puto maricon. - La mirada de el morocho era de pura indignación. Sin comprender por qué alguien le haría eso a él, si era tan lindo, tan él.

— Ya está Juli, ya podes quedarte tranquilo de que no te va a volver a joder. -  Aseguró Enzo. — Ya podes dejar de remarla Juli, llegaste a la orilla. - Las palabras de el tatuado eran completamente sinceras, llenas de simpatía y a la vez de paz. Eso era lo que él le había transmitido en lo que pasaron juntos. Paz, Enzo era hipnotizante. Le había transmitido todo lo que Agustin no le transmitió en un año y medio de relación, y en todo lo que jamás llegaría a generarle.

— Enzo, gracias. Por todo, en serio. Ojalá el destino nos vuelva a cruzar. Mil gracias, y perdón seguro te cagué la noche. - Se avergonzó Julián.

— De nada Juli. Y quédate tranqui, que ni de casualidad me cagaste la noche. Te volvería a ayudar sin dudarlo. - Lo miró con unos ojos indescifrables que no supo entender, pero así se quedar unos segundos, que para Julián, parecieron horas.

— Chau Enzo, nos vemos. - Porque sí, Julián sabía que esa no sería la última vez que vería a Enzo. Lo sentía.

 Lo sentía

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Buenas!!

Sé que tengo que seguir Heartless pero no tengo nada de inspiración para Outer Banks. Y se me ocurrió una idea de un fic enzulian y acá está.

No se olviden de votar!! Ayudan demasiado.

- blond13x.

𝐄𝐮𝐧𝐨𝐢𝐚 - (𝐞𝐧𝐳𝐮𝐥𝐢𝐚𝐧) 𝐞𝐧𝐳𝐨 𝐟𝐞𝐫𝐧𝐚𝐧𝐝𝐞𝐳 & 𝐣𝐮𝐥𝐢𝐚𝐧 𝐚𝐥𝐯𝐚𝐫𝐞𝐳Donde viven las historias. Descúbrelo ahora