El Esposo Ideal

Mas claro que el vino

Serví el vino en su copa viendo como caía chorro por chorro, en el baño el estaba vistiéndose y en mi mente sonaba todo lo que realmente quería decirle, pareció una especie de catarsis su momento en el agua sus palabras no tenían sentido, hablaba como si lo sucedido fuera lo mas repudiable del mundo, sentía que de alguna manera estábamos cometiendo algún tipo de delito moral, o hasta federal.

Si bien es cierto hable con mi lado racional, refugiándome en la responsabilidad del alcohol y lo que permitía nuestra edad y una firma, todo esto era verdad, pero era totalmente diferente a lo que mi lado sentimental quería llegar. Yo quería conservar la empresa de mi padre, no porque me hiciera feliz, había aprendido a amar la visión de mi padre pero estaba seguro que de haber tenido la posibilidad de elegir otra cosa, lo habría hecho, pero el puso su vida en formar una gran empresa en un inicio y luego antes de morir la compañía que es ahora, muchos de sus mas grandes socios inversores querían su lugar en la junta, cuando el murió y yo pase a ser cargo de esta no dejaron de ponerme trabas en el camino y un montón de razones por las que yo no debía hacerme cargo y siempre solía ser intimidada en esas juntas por el hecho de ser mujer y joven sin previa experiencia aparte de la orientación de mi padre, pude sorprenderme cuando usaron la tenue excusa de no poderle brindar un futuro a la compañía, lo cual se traducía como un esposo con el cual ellos podían tratar y unos hijos a los que podrían manipular.

Ahora me encontraba en una situación que se podría relacionar con aquello, yo era una mujer que quería estar con un chico al que durante mucho tiempo había visto como un gran amigo, luego como modelo de hombre de sus sueños hasta uno que lo atraía, que casualmente era su esposo, mire el anillo, el hombre que me lo había puesto parecía estar rotundamente negado a volver a tocarme, ¿Qué acaso no eran los hombres los que no perdían la oportunidad de poder estar con una chica? ¿No eran capaces de separar lo emocional de la pasión? ¿Por que yo no podia hacer lo mismo que ellos?. 

Lo vi saliendo del baño secándose con una toalla pequeña el cabello, llego hasta donde yo estaba y se sentó en la alfombra junto a mi.

--¿No te parezco atractiva?-- estiro la mano y agarro la boquilla de la botella de vino apartándola de mi, me di cuenta de que había dejado de llenarla copa y que había empezado a tomar directo de la botella.

--Ya has tomado demasiado...y sin mi

--No te gusto ¿verdad?

--Sabes que no es eso-- le dio un pequeño sorbo al vino de su copa

--No tenia por que aceptar casarte con alguien que ni siquiera te gusta, solo te hice una propuesta, no te obligue a nada.

--Lisa, no es eso, yo...-- se veía desesperado por encontrar palabras.

--Carajo...no tengo ni puta idea de lo que me quieres decir-- bebí mi copa de golpe y me levante para marcharme de la habitación.

Antes de poder cruzar la puerta como mi brazo, gire para mirarlo, le escurría un poco de vino por el labio.

--Yo no te gusto, así que no tengo por que hacerte pasar por el pesar de dormir conmigo-- tomo mi rostro entre sus manos, los dedos le temblaban un poco.

--Me gustas Lisa, de hecho me encantas-- lo bese y me siguió el beso unos segundos hasta separar el beso pero juntando su frente con la mía-- pero no esta bien.

--¿Por que no esta bien?, tu me gustas no entiendo por que no te puedo besar

--Por que no quiero jugar esto..

Tome sus brazos e intente alejarme de el, no me soltó.

--No se lo que quieres decir así que,,,

--Escucha, estas algo tomada necesitas descansar, que te parece si duermes.

--¿Vas a estar conmigo?-- lo abrace.

--Voy a abrazarte hasta que te duermas...-- beso mi cabeza.

--¿Pero sin playera?

--Sin playera-- su risa se escucho cortada como si esta no fuera impulsada por la alegría o por que mis palabras le hicieran gracia.

Fui a la cama, se quito la playera tras de mi y se acostó a mi lado abrazándome, me acurruque en su pecho y suspire.