Misión en Corea

Un buen trato

- ¿Qué haces aquí? - preguntó Jisoo – creí que ya te habías ido

- Me ofrecieron un buen trato hermanita, tenía que venir a decírtelo

- ¿de qué hablas?

- Tengo tu carta de libertad en mis manos

- Te dije que siguieras el proceso normal

- La policía quiere que actúes como infiltrada, te quieren en su equipo

- ¡Ja!, increíble... inútiles – susurró la chica

- Jisoo, escúchame con atención estos son los términos – Jisoo guardo silencio de inmediato – quieren que te unas al equipo de infiltración de la operación que esta dirigiendo Taehyung, a cambio, ellos prometen darte libertad condicional, bajo la condición de no reincidir

- Nam – Jisoo quiso interrumpir

- Déjame terminar... - ella guardo silencio otra vez – no tocaran tus cuentas bancarias, ni tus propiedades, además ofrecieron asumir los costos de los tratamientos médicos de mamá, ya sea aquí o fuera del país

- Ya veo... por eso quieres que reconsidere ¿no es así?

- Si

- Pero Nam, tengo demasiado dinero, a mamá no le faltara nada te lo juro

- Eso no es todo... Jungkook... él entra en el trato, será liberado de todos los cargos, bajo las mismas condiciones que tu – Jisoo se volteo hacía la celda de su amigo incondicional, estaba profundamente dormido en una esquina – creo que es un muy buen trato

- Pero... ¿Qué carajos quieren de mí? ¿Por qué no usan a la maldita policía que engatusó a Jungkook o alguien que trabaje ya para ellos? ¿de qué les sirvo yo?

- Te quieren a ti por tus... habilidades, la organización que quieren desmoronar conoce a cada integrante de la policía, ya intentaron todo y siempre son descubiertos, pero tu... tú no eres policía, Ellos no desconfiaran de ti, además, eres muy buena engañando

- Maldición – dijo para sí misma

- Piénsalo bien, tomate esta noche, ya es tarde, volveré en la mañana, evalúa bien tus opciones hermana

Esa noche Jisoo no pudo dormir ni siquiera un poco, la incomodidad de la celda, la presión de tomar una decisión, no ayudaban mucho. Jungkook despertó y por un momento olvido que estaba recluido en una celda, como si hubiese sido un sueño, pero pronto aterrizó en la realidad.

- No pegaste ojo en toda la noche – preguntó

- No, no pude dormir

- Hey, tranquila, todo saldrá bien, el estúpido policía esta interesado en ti, no te dejará encerrada

- No me importa ese idiota, solo quiero que ambos nos libremos de esta – Jungkook en su interior sentía que este era el fin de su carrera como estafador profesional

- Dudo que yo tenga esperanza de salir, no soy precisamente una blanca paloma, he cometido crímenes – verlo tan triste le partió el corazón a Jisoo

- Jungkook, ¿confías en mí?

- Con mi vida

- Te sacaré de aquí, lo prometo

Taehyung entró en el lugar dando un portazo estruendoso, se acercó lentamente a las celdas.

- ¿pasaron buena noche? – Jungkook simplemente lo ignoro, y desvió la mirada sin decir nada, no quería caer en provocaciones, Jisoo lo observó furiosa, y solo con su mirada logró traspasar su sentir a Taehyung – vendrás conmigo Soo

- No te atrevas a llamarme así otra vez, si no quieres que deje estéril de una patada

- Uf – soltó Taehyung – no seas insolente – abrió la celda y de inmediato la esposo – vamos - la llevó a la misma habitación que el día anterior, Nam estaba ahí sentado – bien... supongo que pudiste pensar en lo que te dijo tu hermano ayer, tuviste bastante tiempo

- Si, lo pensé – dijo Jisoo - ¿Por qué demonios quieres que yo haga esto?

- Por que se de lo que eres capaz – Jisoo sonrió

- Aceptaré, solo si Jungkook trabaja conmigo, es mi dupla, somos un perfecto equipo – Taehyung dudó un segundo

- No lo necesito en mi operación

- Entonces no hay trato – Taehyung volvió a pensarlo

- ¡Está bien!... está bien maldita sea, acepto