Sophie.

117 9 0
                                    

¿Por qué no me cuentas?

¿No soy de suficiente confianza?

¿Qué te duele?

¿Qué puedo hacer por ti?

Nunca recibo respuesta a esas preguntas, Simon es un chico realmente lindo, su comportamiento conmigo siempre fue atento y estos últimos días que lo he visto más decaído de lo normal he deseado devolverle el favor... Pero se me hace imposible.

Deja esas actitudes, Simon

Mírame, ¿Cómo puedo ayudar?

Intento comprenderte pero es realmente difícil, tus ojos no me dicen nada, están vacíos, son más oscuros de lo que normalmente son.

La melancolía que traes contigo me hiere también.

¿Puedo hacerte sonreír?

Just tell me, ¿I can?

No era más que un día como otro en la escuela, él llegó en silencio y se sentó en aquella mesa que compartíamos, dejé a mis amigas atrás para ir a saludarle, me senté a su lado y lo miré con una gran sonrisa, claro, con ojos cansados y tristeza en su expresión me la devolvió... En ese momento solo pensé en abrazarlo, lo hice, me acerqué y enredé mis brazos alrededor de su cabeza y lo acogí ahí.

—¿Por qué el dichoso abrazo?— Me preguntó él, lo solté y reí, después solo me dispuse a responder—; No lo sé... ¡Quizás para empezar bien el día!

Me miró con rareza, sí, admito que cambié mucho esos días, por él, quería estar bien para él y que él también lo estuviera.

—Normalmente no eres así.

—Lo sé, solo que lo pensé bien y dije que quizás hay que sonreírle a las cosas por más jodidas que se encuentren.

Suspiró y nos quedamos hablando el resto de la clase.

Dime Simon, ¿Qué hay en tu cabeza? ¿Puedo comprenderlo?

¿Puedo?

Decadencia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora