LOS WEINBERG

CAPÍTULO 1

El sacerdote, extendiendo las manos, saluda a la congregación:

"El Señor esté con ustedes."

El pueblo responde al unísono:

"Y con tu espíritu."

Todos hacemos la señal de la cruz:

>"Que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo desciendan sobre ustedes."

Todos responden:

"Amén."

Poco a poco, las personas comienzan a salir de la iglesia. Fuera, mi mejor amiga, Noemi, que es como una hermana para mí, me dice:

_Al fin terminó la misa—  levantando las manos en un gesto de desesperación. "Si yo fuera el padre, me sentiría ofendido. __Parecía que nunca iba a acabar.

Noemi nunca ha sido fanática de los cultos. Ir a la iglesia todos los domingos debería ser una costumbre, considerando que estamos en un orfanato de monjas. Pero, como todos, tenemos nuestras sombras. A menudo me pregunto cómo habría sido mi vida si no me hubieran abandonado. Todos los niños aquí anhelamos ese amor familiar.

"No seas exagerada, NOEMI " le digo, rodando los ojos. "__Si solo el sermón duró treinta minutos.__"

"__¿En serio? A mí me ha parecido una eternidad. No entiendo cómo lo aguantas.__"

"__Deberías acostumbrarte; llevamos aquí desde que éramos recién nacidas.__"

"__Lo sé, pero no puedes imaginar cuánto deseo cumplir dieciocho y salir de aquí volando con una beca. Quiero ver la grand vie.__" Me río por su uso del francés, que siempre me hace sonreír.

__Lo más importante__," continúa, con entusiasmo, "__es que nos dieron tiempo libre para pasear por el pueblo de Vascostones. Vi en las redes sociales que unos artistas famosos vendrán hoy.__"

Saca su teléfono Huawei de un bolso negro de marca Gucci, que compró el verano pasado con el dinero que ganó en trabajos vacacionales. Me muestra una publicación en WhatsApp.

"__¡Quiero que vayamos a esa fiesta!__"

"__A ver, ¿tú y quién?__" le respondo. "__Olvidas que la fiesta es a las ocho y ya son las doce. Tenemos que regresar a las seis, o no quiero problemas con la hermana Matilde.__"

"__Tranquila, tengo todo planeado.__"

"__¿Tú, con un plan? Ninguno de tus planes ha salido bien hasta ahora.__"

"__¿Me estás llamando tonta?__" dice, ofendida.

"__No, solo quiero saber cuál es tu gran idea.__" Respondo, tratando de mantener la calma.

"__Le diremos a la hermana que nos perdimos porque es nuestra primera vez aquí en Vascostones.__"

Es cierto que es nuestra primera vez en este lugar; nos dijeron que era mejor pasar el verano en otro pueblo.

"__¿Eso es tu plan? Ay, Noemi, ¿de verdad crees que se lo creerán?__"

"__Dime, ¿cuál es tu plan? Si crees que el mío es tan malo, porque hoy tengo que disfrutar. Es la última feria del verano y no me pienso perderla.__" Su voz es firme mientras se da la vuelta y avanza hacia la salida.

Suspiro, sin otra opción que seguirla. Siempre hemos estado juntas y no puedo dejar que una feria nos separe. No puedo permitir que ella vaya sola; las calles pueden ser peligrosas. La sigo.

"__Espera, no tengo piernas largas para correr.__"

Ella se detiene y sonríe, y reconozco esa sonrisa de victoria.

Tras caminar un buen rato con los demás del orfanato, Noemi me da señales de que es hora de irnos. Pensé que se había olvidado de su fiesta, pero no; en esos momentos, su memoria es infalible.

Mis piernas comienzan a cansarse. A veces me pregunto si realmente conoce el camino, porque no hemos llegado. Así que le sugiero que tomemos un taxi.

"__Noemi, por favor, ya no aguanto más. Sería más fácil tomar un taxi y llegar de una vez, ¿no crees?__"

Ella se detiene, inquieta.

"__Lighia, prométeme que no te enfadarás."

Un mal presentimiento se apodera de mí.

"__Depende de lo que vayas a decir; si son malas noticias, no prometo ser amable.__" Hablo con seriedad, notando su expresión preocupada. "__¡Dímelo!__"

"__Bueno, se me olvidó el dinero del taxi y tampoco sé cómo se llama el lugar de la feria.__"

¿Acabo de escuchar bien? ¿La muy distraída de mi amiga dice que no recuerda el nombre del lugar de la feria? No puede ser.

"__¿Qué has dicho? ¿Estás diciendo que estamos caminando sin rumbo y, para colmo, te olvidaste del dinero?__" Exploté. "__¿Una como tú, que tiene tantas ganas de ir a esa fiesta, no pensó en llevar lo más importante?__"

"__Ya, para; me estás avergonzando.__"

"__¿Avergonzada? ¡Mis piernas!__" digo, frustrada. "__Si encuentro dinero en mi bolso, nos volvemos al orfanato, y nada de feria.__" Digo, enojada. ¿Cómo puede ser posible? Como si tuviera mala suerte, no hay nada. "__Vamos de regreso.__"

—Lighia... Lighia.

—Lighia, nada —" Me giro para decirle que no acepto una negativa, cuando, de repente, mis ojos se cruzan con uno de los chicos que no esperaba ver saliendo de un centro comercial, y mi corazón se acelera.

DEREK.

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