La Amiga De Emma (Shinichiro × Lectora) +18

🔞 De Tu Clase 🔞

[Shinichiro]

Cuando supe que Emma se quedaría a pasar la noche en casa de ____, sabía que algo no andaba bien. Después de todo, hoy se quedaría el amigo de Mikey, "Draken", chico que curiosamente tenía a mi hermana en la palma de su mano. ¿Podría ser que mi hermana se había pasado de copas? No me sorprendería que su amiga la estuviera encubriendo. Con lo poco que la conocía, sabía que era muy alocada como para no hacer algo así.

—Shinichiro, ¿estás ahí? Te estoy hablando hace rato —soltó Mikey, algo confundido por lo distraído que yo estaba —. ¿No escuchaste lo que te dije?

—Perdón, mis ideas están algo desordenadas. Saldré a buscar a Emma mañana por la mañana.

Necesitaba recoger a mi hermana y saber que estaba bien, y tal vez, ver a... ¡No!

Apenas la alarma sonó a las diez de la mañana, me alisté y salí de casa, dirigiéndome directamente a la casa de ____.

Cada vez que pensaba en verla, mi estómago se revolvía y sentía como el calor recorría mi cuerpo. Pensé que eso era algo muy enfermo de mi parte. Después de todo, ella todavía no era mayor de edad como para intentar algo con ella. No solo eso, sino que tampoco quería algo con esa chica tan problemática y con mala fama.

Rezaba por no llegar a su casa, pero nada estaba de mi lado hoy. Llegué a su linda casa y toqué la puerta, esperando a que ella abriera, cosa que hizo después de que tocara la puerta como dos veces más.

Cuando abrió la puerta, ____ estaba arreglando su cabello desordenado. Se notaba que recién había despertado de un profundo sueño. Soltó un quejido, sospeché que era la resaca, pues, no me sorprendería que hayan bebido demás, aunque eran menores de edad, pero también sería hipócrita de mi parte reprocharle eso a Emma o a su amiga. Es más, no tendría el derecho de hacerlo con ____, después de todo, ella era una chica independiente y que no tenía nada que ver conmigo.

—Buenos días, ____ —saludé, desviando la mirada ligeramente para no ponerme tan nervioso —. Vine por Emma, ¿podrías decirle que venga?

Sentí nuevamente ese desagradable cosquilleo en mi estómago, y mis pensamientos no me ayudaban en nada. Pasaban una y otra vez los recuerdos de los besos que me había dado, y esa mirada jodidamente traviesa que podría empujarte a hacer cualquier locura cuestionable e intensa.

[____]

Cuando abrí la puerta, estaba algo adormilada y con resaca, cualquiera se hubiera dado cuenta, hasta Shinichiro.

—Buenos días... Emma está durmiendo, enseguida la despierto, pasa —dije con la voz algo temblorosa, hasta su perfume podía estremecer mi cuerpo.

Cuando le había abierto la puerta, quería decir algo como: "¿Vienes por otro beso?" Pero no lo vi conveniente.

Lo hice sentarse en el sofá mientras me dirigía a la habitación donde estaba durmiendo Emma, y también debía pensar en cómo encubrir a mi mejor amiga.

—¡Emma, despierta! Shinichiro vino para recogerte y no podemos dejar que te vea con la caña.

Emma al escuchar eso, dio un salto de la cama y corrió a vestirse y arreglarse el cabello y la cara.

—Mierda, me van a prohibir salir si me ven así, ¿qué hago? —preguntó la rubia con temor en sus ojos.

—Mira, ve rápido a su motocicleta y mientras estás esperando afuera, yo intento convencerlo.

No parecía una idea muy brillante, pero podría hacer lo que sea con un solo beso en sus labios.

—Te lo dejo en tus manos.