Prólogo

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Un jóven y una niña, conversando plácidamente bajo la densa luz de un hermoso atardecer en un gigante acantilado. La niña tenía sus mejillas enrojecidas, temblaba, respiraba agitadamente, no era capaz de hablar claramente, unas cristalinas lágrimas caían de su rostro, estaba confundida, estresada y con pensamientos futurálgicos. El jóven por otro lado, mostraba una cara tranquila y empática, intentaba calmar a la niña, hablaba compasiva y tranquilamente.

La niña en un intento de hablar de forma clara, exclamó y preguntó. - En todo este tiempo, ¡¿POR QUÉ NO ME LO DIJISTE?!-

El joven respondió pasivamente. - No quería preocuparte demás, aparte, sabía que no me creerías si no te lo demostraba y no era posible en ese momento.

La niña, aún sorprendida, volvió a preguntar. -¿Pero cómo sabré si tomé la decisión correcta?-

El jóven, la calmó sin problema, respondiendo de nuevo a su duda. - Lo sabrás cuando estés completamente segura-

La niña, ya más calmada, preguntó por última vez. -¿ Te volveré a ver?

El joven, también por última vez, le respondió. -Si no cambias de rumbo en tu vida, tal vez si, Hasta luego.

La niña respondió a la despedida y los dos se abrazaron, antes de que el jóven desapareciera para siempre.

Pero... ¿quién era ese jóven? ¿Quién era esa niña? ¿cuál era esa decisión, esa cosa que se dijeron entre si? Ay, tantas preguntas y ninguna respuesta, tan ambigÜas como el propio significado de la vida...........

Trans-pasando el tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora