Delicato (JHS +21) Completa.

Siete

Hoseok.

Un ruido sordo de un golpe, más algunos disparos.

LA QUIEREN VIVA.

Es lo último que se escucho antes de que se perdiera la comunicación, me levante de la cama, eran las 6 de la mañana aquí, por lo que en Seúl deberían ser las 9 de la noche. Si la quieren viva solo es por dos razones, chantaje a mi familia o es mi madre logro hacer algo antes de que desapareciera.

—¿jefe? —mis hombres me siguieron apenas salí de la habitación.

—Regresamos a Seúl, raptaron a Seoyon, quiero que se muevan como si su vida dependiera de ello porque si no la encuentro en 12 horas va a correr sangre.

No había recibido ninguna llamada, por lo que no es cuestión de rescate, eso quiere decir que tengo mucho menos tiempo aún para encontrarla. Mis hombres me mostraron video y fotos de donde la raptaron, mataron a su guardaespaldas, es obra de profesionales, Leewon no pudo reaccionar siquiera.

En cambio, mi mujer dio pelea, su vestido estaba lejos de la camioneta, su teléfono se había roto, y se notaban rastros de pelea, si le dispararon es porque no fue sencillo atraparla.

Si tiene un solo rasguño rodarán cabezas.

Apenas puse un pie en Seúl mi teléfono se lleno de llamadas de mi gente, ubicaron el vehículo donde se la llevaron y al parecer es gente de la familia de su madre.

No había dormido una mierda, tampoco me cambie, fui directo a esa casa, así tuviera que matar a todos la recuperaría.

—Si quieren bajarse es su decisión.

Baje de la camioneta, engatille y sin dejar que loa guardias reaccionarán, les dispare al igual que al circuito de seguridad, mire directo a la cámara para que supieran que había llego.

Mis hombres me siguieron, los disparos entre ambas seguridades se escuchaban por todo el lugar. Llegue rápido a la mansión de los Kang pero apenas iba entrar cuando su asesino principal venía herido del pecho pero la sonrisa que poseía la conocía muy bien.

—¡Jung! —aceleró la moto —¡Tu princesita escapo, quien la encuentre primero se la queda!

Esto se ha vuelto una competencia que no perderé...

Seoyon

Corría lo más rápido que podía, me habían logrado atrapar en el teatro, pero si algo había aprendido de mis padres era a no darles el gusto de retenerte.

Prefería morir a ser capturada por esa familia.

Así que sobrevivir y escapar era mi objetivo. Ellos no eran confiados así que habían puesto a Yu el asesino principal de los kang a mi cargo. Pobre imbécil se confío un poco de su habilidad y menosprecio la mía.

Cuando lo ignore, entro a mi habitación y ahí fue donde logré someterlo, solo tenía una oportunidad. Me gustaría haber salido ilesa, pero por algo es el mejor asesino.

Con los golpes es seguro que mínimo tengo una costilla rota, duele respirar, moverse es peor pero no tengo opción. No traer zapatos es un obstáculo más, pero conozco toda esta zona mi madre se encargo de ello.

Por un lado, deseaba ser salvada por mi tío, pero por otro quería matarlos a todos con mis propias manos.

Escuche el ruido de una motocicleta.

—¡PRINCESITA! ¡SAL A JUGAR!

—La mierda, puto loco.

Pensé que tendría más tiempo, me detuve a pensar un segundo y tomar aire. Las calles de aquí son muy cerradas y por el sector nadie ayudará a alguien que lo persigan los Kang.

El ruido de la moto se acerco, sentía el pulso en mi cuello, en mi estado actual me atrapará. Apenas iba a dar un paso para volver a correr, cuando cubrieron mi boca y me arrastraron dentro de un almacén. Aún llevaba una navaja en mano así que no dude en atacar.

—Tranquila— la voz familiar me hizo tirar la navaja, que había sido detenida de manera hábil —ya estoy aquí.

Al verlo sentí como si hubiera estado aguantando la respiración, una gran cantidad de aire entro a mis pulmones y un mareo me ataco, mis heridas dolieron con fuerza, y un par de lagrimas brotaron de manera involuntaria, tomo mi rostro y las recogió con sus labios de manera lenta.

—Tan valiente, mi chica es tan valiente, deja que tu hombre se encargue.

Nunca lo había visto con esa mirada, lo había visto molesto, enfadado, enojado incluso, pero la mirada de ahora era diferente. Me recorría un escalofrió desde la nuca hasta el final de mi espina dorsal. Era como presenciar a la muerte.

La motocicleta se acerco de nuevo, mi tío no se movió, me tenia de la cintura con una mano, mientras en la otra desenfundaba su beretta de dentro de la chaqueta, la moto se asomo, pero en un pestañeo derrapo, un sonido de un bip lleno mis oídos. Hoseok había disparado dos veces a las llantas, haciendo que Yu cayera rodando por el asfalto. Con tranquilidad mi tío se acercó dejándome paralizada. Yu no reacciono, no tuvo tiempo de asimilar lo que había pasado, solo vio por un segundo el cañón de la pistola antes de que le dieran un tiro en la cabeza.

—Me molesta matarte de esta manera, pero ella esta herida.

Mi corazón latía a mil por hora, sabia que hacía, lo vi manchado de sangre muchas veces, escuché sus peleas otras tantas, pero era la primera vez que lo veía matar a alguien y fue una de las cosas mas estimulantes que mis ojos presenciaran. Me alzo en brazos para llevarme cargando hasta al auto, no podía dejar de ver el cuerpo en el asfalto sin sentir una enorme satisfacción, mi centro palpitaba al ser tocada por el hombre que realizo aquello.

Hola mis bolitas de perversidad, me les perdi juijujuju, pero aqui andamos de nuevo