Capítulo 2.

58 1 0
                                    

-Es hora de levantarte Jimena.- Escuche a mi madre decir, detrás de la puerta.

-Un minuto mas madre.- Conteste con un ojo cerrado y el otro abierta. Luego lo que para mi fueron cinco minutos, en realidad fueron veinte en el reloj.

-Jimena, ya vistes la hora.

Cuando me di cuenta, mi madre estaba apunto de entrar en mi habitación y yo aun permanecia con mi fiel amigo, el vibrador, el mismo que me habia hecho gemir de placer en la noche. Lo tome rapido y lo metí bajo la almohada.

Abriendo la puerta de un sopetón mi madre entró diciendo: -No puedo creer que tienes 22 años y aun tu madre se encargue de levantarte todo los días.

-Buenos días mamá, también te amo.

Mi madre comenzó abrir las cortina y luego se sento en la cama. De la nada mi vibrador se prendió. Toda la cama se movia, pues estaba en el nivel más alto. Mi madre miro mi almohada y me pregunto, qué era eso.

-oh nada mami, es solo mi celular. Debe ser Estrella. Es que mi celu esta en modo vibrando-dije muy nerviosa y sudando frio.

-Y valla que vibra. Bueno contestale y luego vete a bañar. Recuerda que llegaré tarde. Cuando salga del trabajo voy a pasar a ver a tu tía. Te Amo

-Yo más mamá.

Lo que mi madre desconocía era que yo en realidad no trabajaba ese día, pero habia quedado en mi casa, con mi novio, para tener un día lleno sexo, placer y mucho sudor. Al mirar mi celular me encontré con un mensaje de él .

"Buenos días mi vida"

"Buenos días mi amor." Ya mi madre se fue.- conteste.

"Voy de camino."

"Te estoy esperando"

Rapido fui a ducharme, sepillar mi cabello y lavar mis dientes. Cuando hice todo aquello me quede un minuto observandome en el espejo. ¿Qué tenía yo que volvía loco a aquel hombre? Mi piel es color canela, ojos oscuros, pelo largo y ondulado castaño, mi dentadura no era perfecta y tenia uno que otro barro en mis cachetes. Peso 115 libras, soy bastante bajita y con un trasero pequeño. Mis senos son bastante grandes para mi cuerpo. Ellos se ven bastante bien. Tenia algunas estrias en los muslos, pero aun asi mi novio me decia entre sus brazos que yo era hermosa. Deje mis pensamientos a un lado y me dirigí a una gaveta llena de ropa interior de "Victoria Secret". Elegi una combinación negro y rosado de encaje y me la puse. Decidí llevar solo eso, para ver como el pene de mi hombre tomaba fuerza al entrar por la puerta. Pensanso en mi novio, aun no podia creer como aquel hombre tan hermoso se había fijado en mi. Era el tipo de hombre que toda mujer querria. Piel clara, buen cuerpo, ojos claros y profuntos, sonrisa perfecta, cuerpo de pelotero y un pene rosado y con un tamaño digno de tomarle miedo.

Escuche tocar la puerta y pinte rapido mis labios con un color rosado muy bonito. Sali con un paso muy sexy y la abrí mirando solo su boca y de su boca a su pene.

-Hola amor.

Jale de inmediato a mi hombre, claro le digo mi hombre porque el es solo mio. Cuando de momento me tope con una pequeña cara mirandome curioso.

-ahh-grite- no me dijistes que traerias a tu hijo.

-Lo siento amor. Veronica lo dejó temprabo en casa porque debe ir a estudiar. Y pues los planes cambiaron, pero prometo compensarte el viernes.

Oh ya eran dos las personas que tenian planes conmigo. Yo que de imaginar el sexo que en ese momento pudiera estar teniendo y no lo tendria, me moleste un poco, pero tendria que lidiar con la situación. Su hijo no me molestaba, al contrario, es un niño encantador que le gustaba jugar y estar conmigo. En ocaciones me llamaba mami. Su nombre es Dilan y tiene 4 años.

-Papá porqué ella lleva esa ropa puesta.

Al escuchar aquella pregunta salí corriendo a cambiarme. Hasta había olvidado la poca ropa que llevaba puesta.

Buscando Sexo Encontré el AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora