El lado oscuro de los sueños

Parálisis del sueño.

sueño anónimo

Hoy me está costando más conciliar el sueño, más de lo normal.

La luz de la luna se refleja en toda la habitación, ¿será eso? ¿será la claridad que no me deja dormir?

El gran dilema es si me debo levantar a cerrar la cortina o si la pereza me gana y mejor me quedo acostada y que esperar a que el sueño me invada.

Pasa el tiempo y se siente muy lento, aun así, no tengo nada de sueño. Bueno tal vez cerrando la cortina pueda conciliar el sueño al fin.

Quise mover las sabanas para levantarme, pero mi brazo no responde, nada en mi cuerpo responde. Algo en mi pecho comienza a cosquillear y mi respiración es un poco más rápida.

Escucho un crujido y veo que la puerta, que está a mis pies, comienza a abrirse lentamente. Algo más comienza a escucharse en la habitación, como si algo se arrastrada bajo mi cama.

El miedo se apodera por completo de mi al no poder moverme, al no poder gritar, al no poder pedir ayuda, al no poder hacer nada. Mi respiración está más agitada y siento como si mi corazón fuera a estallar al ir tan rápido.

A mis pies siento, partes de la cama que se hunden como si alguien o algo estuviera subiendo en ella. Y ese algo comienza a presionar mi cuerpo con fuerza contra la cama.

Aquella inexplicable fuerza que me presionaba el cuerpo se comenzó a sentir más fuerte en mi cuello, haciendo que involuntariamente mi boca se abriera.

Algo se desprendió con velocidad desde el techo de la habitación, una especie de neblina demasiado espesa y oscura se esparcía por toda la habitación y todo lo que tocaba se caía al piso. De apoco se comenzó a acumular justo arriba de mí, tomando una forma humanoide.

Sentía como esa cosa me observaba fijamente y de un momento a otro, sin poder reaccionar, se volvió a dispersar rápidamente, pero esta vez comenzó a entrar en mi boca tan bruscamente que mi garganta ardía horriblemente.

Cada instante que pasaba me costaba más el respirar al punto que mi desesperación no daba más, sentía que esa cosa recorría cada parte del interior de mi cuerpo y sentía como si quisiera controlarme.

El miedo y terror iban en un aumento increíble, sentía que debía hacer algo así que con desesperación, no sé de donde saqué fuerzas, pero pude mover mi mano derecha y apreté con brutalidad mi pierna haciendo que volviera en mi misma y de golpe me senté en la cama tratando de controlar mi respiración agitada.

Mi corazón aun palpitaba demasiado rápido.

Observé a mi alrededor, la puerta estaba cerrada, las cosas estaban en orden y todo se veía normal, como si hubiese sido un sueño. Pero aun sentía ese ardor molestando en mi garganta.

¿de verdad fue un sueño?