Tulips

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Chapter Fourteen

Las gemelas Kawata en cuanto se enteraron partieron de inmediato. Emma le había avisado a Nahoya y esta fue corriendo en dirección al cuarto de su hermana de forma inmediata

En cuanto a Takashi, fue avisada por Souya. Quería ir, pero no quería despertar a sus hermanas para que la acompañaran así que optó por pedirle el favor a Hakkai pero en cuanto lo contactó este también quería ir así que al final se decidieron porque Yuzuha cuidara a las hermanas Mitsuya. Así fue como, y después de dejar a su hermana mayor en casa de su mejor amiga, Hakkai se fue con Takashi hacia el hospital

La última en enterarse fue Inupi quien fue avisada por Hakkai. La rubia de cabellos dorados no dudó en agarrar su motocicleta y partir, aunque fueran las 10:20 pm. Cuando llegó al estacionamiento del hospital se percató de todas las motocicletas de sus amigos y corrió en dirección a recepción

──Disculpe ──tomo un poco de aire por haber corrido ── ¿En dónde se encuentra la paciente Hanagaki Takemichi?

──Como han preguntado por ella desde que llegó ──le dedicó una sonrisa amable ──. Está por este pasillo a la derecha

──Muchas gra...

¡Inupi!

La rubia volteó en la dirección de dónde provenía la voz encontrándose con el rubio del tatuaje en la sien

──Draken ──lo miró alarmada ── ¿Sabes algo de Mitchy?

──Creo que lo mismo que sabes tú ──ambos comenzaron a caminar en la dirección que le había indicado la recepcionista a la rubia ──. Lo último que supe fue de una llamada de Emma diciendo que Takemicchi hacía ya una hora que había entrado en el salón de operación

Cuando ambos llegaron lo primero que observaron fue a un Mikey sentado con las manos apoyadas a sus rodillas y los dedos entrelazados haciendo un puño, por lo que Draken se acercó a él, a Baji y a Izana los cuales permanecían a su lado. Por parte de Inupi se acercó a sus seis amigas y a Hakkai

── ¿No se ha sabido nada? ──todos negaron ── ¿Me pregunto quién fue capaz de hacer algo como eso?

──A mí me dijo Baji-san que era que estaban cruzando un puente peatonal y que de momento se amontonaron muchas personas alrededor de Mikey y que este se terminó apartando y que por ende llegó primero al otro lado, para cuando Mikey elevó la mirada y ver donde estaba Takemichi pues la primera impresión que se llevó fue la de ella cayendo al suelo con el vientre ensangrentado

──Pobre Takemichi ──dijo Mitsuya ──. Me tiene preocupada

──Nos tiene a todas preocupadas ──dice Chifuyu ──. No sé qué me pasaría si llego a perder a mi compañera

──Y yo a mi futura cuñada ──todos miraron a Emma ── ¡Oh vamos! Ni que fuera mentira ──los miró a todos con una mirada entornada

──Bueno ──dice Nahoya ──, no podemos discutir que a Mikey se le cae la baba por Takemicchi ──comentario que sirvió para que rieran y se aligerara el ambiente

Nadie, nunca, había visto a Sano Manjiro temblar del pánico. El rubio parecía estar tranquilo y sereno, pero si te fijabas bien podías observar que sus manos entrelazadas estaban inquietas y temblorosas. El pobre intentaba por todos los medios hacer que su temblor no se notara fracasando miserablemente, todos los que se encontraban a su alrededor se habían dado cuenta, pero ninguno quiso decir nada pues entendían el porqué de su estado

──Tienes que tranquilizarte enano ──dijo Baji ──, no sé por qué estás temblando de esa manera si sabes perfectamente que la pequeña Mitchy es bastante fuerte

En lo que se refería a Draken y a Izana quisieron golpear al chico de cabellos negros por su comentario fuera de lugar, pero las intenciones de Keisuke eran las mejores. Pretendía hacer que su amigo se diera cuenta que su rubia de ojos azules era una guerrera y que conociéndola ella no quería que ese enano estuviera así de preocupado

──No puedo evitarlo Edward ──le llamó por el apodo que se inventaron de niños ──, sabes lo importante que es Takemicchi para mí

Contrario a lo que los otros dos pensaban, Mikey no había mirado mal a Baji, o sea, la idea del de ojos chocolate había resultado. Podía tener ideas loables de vez en cuando

── ¿Y qué? ──arqueó una ceja en su dirección ──. Sabes que esa rubia sin saber pelear da la cara en cada batalla de la Toman, nos levanta los ánimos cuando ya no podemos ni con nuestra alma, en más de una ocasión ha asumido el papel de una líder y por sobre todo ──se acercó y se agachó para estar a su altura poniéndole una mano en su hombro para reconfortarlo ──, ella prometió que te ayudaría a cumplir tu sueño de crear una nueva era para los delincuentes ──le mostró una sonrisa en donde enseñó sus hermosos colmillos

Mikey lo miró y por un momento sus temblores cesaron. Baji Keisuke podía ser un bruto sin remedio pero sabe perfectamente que haría lo que fuera por sus amigos. Haría nota mental de darle las gracias a Chifuyu después, se estaba dando cuenta que esa rubiecita de ojos verdes le hacía mucho bien a su amigo de la infancia

¡Chifuyu!

Todos se alarmaron cuando una voz de alguien mayor llamó a dicha chica. Se trataba de su madre, quien al ser asistente de enfermería en el quirófano, se brindó para dar las noticias a todos esos jóvenes ahí reunidos

──Mamá ──la ojiverde se acercó a la rubia mayor ── ¿Cómo está Mitchy?

Todos la rodearon de momento y comenzaron a saturarla a preguntas, especialmente Mikey

──Un momento por favor ──dijo a lo que todos se callaron ──. La paciente está bien, la operación fue un éxito ──todos suspiraron aliviados y se abrazaban con emoción

Chifuyu conocía a su madre. Se percató que esta había dicho esa noticia con un semblante algo serio. Su mamá no había dicho todo

──Pero eso no es todo ¿Verdad? ──ese comentario hizo que de nuevo le volvieran a prestar atención a la rubia mayor

──Bueno...no ──suspiró ──. Debido a algunos golpes que recibió supongo qué de la caída le ha provocado un ligero shock y ahora se encuentra en estado de coma ──todos la miraron asustados ──. Los neurólogos la examinaron y dijeron que no tenía nada grave pero que hacía falta que despertara para dar un diagnóstico más detallado

── ¿Y cuándo podía ser eso señora? ──preguntó Mikey asustado

──Puede tardar días, semanas, incluso meses ──dijo algo apenada ──. Es en dependencia de lo grave que haya sido el golpe para ella

Mikey cayó arrodillado al suelo. Definitivamente era el peor día de su vida. No se podía creer que de un momento a otro el día perfecto, con su chica favorita, se había vuelto tan oscuro. Mataría, si fuera necesario, a la persona que fue capaz de hacerle algo como eso. No se terminaba de tragar que fuera un accidente como le había hecho saber a la mayoría. Lo averiguaría, los sacaría de debajo de la tierra si fuera necesario. Estaba seguro que con ayuda de Baji y de otro de sus amigos de la infancia podía dar con el culpable

──Baji ──se levantó y llamó al pelinegro para hablar en privado

── ¿Crees que fue un ataque verdad? ──arqueo una ceja, lo conocía muy bien

──Entre tú, Sanzu y yo ──puso una sonrisa macabra ──, lo descubriremos todo