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El menor de ellos, observó una y otra vez el teléfono, miró de reojo al causante y pegó una risotada que llamó la atención de quienes estaban ahí.
Todos estaban esperando en el aeropuerto para abordar, ya que ellos, a diferencia de sus ex guardaespaldas no pudieron conseguir boletos junto a ellas.
Cuando llegues, avísanos y mandaremos un auto para ustedes...
— ¿Qué es tan gracioso? — pregunta el mayor.
— Esto... — mostró el menor.
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El mayor soltó una risotada, contagiando al resto, a excepción de Taehyung que seguía contestando todos los mensajes de felicitaciones que le llegaban.
— Parece que le inyectaron la dosis de papá luchón — se burló Yoongi haciendo que Taehyung le prestara atención, dándose cuenta de que hablaban de él.
— Les respondería, pero ustedes no conocen el sentimiento de ser padre — señaló orgulloso.
— Ni siquiera lo conoces y actúas así, imagino como actuarás mañana cuando lo veas — sonríe Namjoon.
— Es que es espectacular — dijo lleno de alegría — ¡Soy papá! ¡Papá! Desde ahora voy a pedir que me llamen como "papá de Han" — decía lleno de ilusión — ¡Ahhh, es muy lindo! — sonríe mirando la foto de su hijo, que ahora era su fondo de pantalla.
Todos seguían riendo, cuando ya todo estaba más tranquilo — ¿ Has pensando en lo que le dirás a Jisoo? — pregunta Jimin en un susurro.
La mirada de él se llena de tristeza y algo de decepción, se queda sin respuestas.
Él no debería estar decepcionado, no debería estar molesto, pero a veces no puede evitarlo, no obstante, su misma conciencia le recrimina.
Su amigo asume el silencio como una respuesta llena de tantas cargas, solo esperaba que Taehyung pueda conversar con Jisoo y ambos puedan escucharse.
Los pasajeros rumbo a Australia, por favor de abordar el avión.
— ¡Vamos! — exclamó Taehyung adelantándose unos 5 metros a sus amigos que recién se ponían de pie.
