Plan niñera

Buscando niñera

Capítulo 1

El estrés lo consumía. No sabía qué hacer. Ha estado estresado toda esta semana buscando como loco quien podría cuidar a Harry mientras él estaba trabajando pero había buscado y no hallaba a nadie que lo cuidara. Su madre que había ofrecido y James ante la desesperación de no encontrar a nadie tuvo aceptó pero en vez de darle tranquilidad solo le dió más problemas, no quería que su madre lo cuidara tanto tiempo así que necesitaba una nueva niñera de inmediato pero había un problema.

Harry.

No lo tomen mal. James ama a su hijo, en serio. Daría cualquier cosa por él, movería todos los planetas del mundo solo por asegurar la integridad de su pequeño pero había algo en lo que simplemente Harry no ayudaba.

Mantener a las niñeras.

Harry es un niño bien portado, educado y amable. Tiene el porte perfecto de un Gryffindor ejemplar demostrando las perfectas características de la casa de Hogwarts, su perfecta valentía cuando Ginny le tenía miedo a rana de su patio y Harry la protegió tomando la rana de una pasa y sacándola del terreno de los Weasley, poco después se enteró que era una rana venenosa y James casi muere del susto o cuando demostró su caballerosidad defendiendo a Hermione de unos puristas que la querían hacer menos por su sangre, ese día Harry había agregado a su lista de amigos a la pequeña niña de rizos y fue presentado ante él.

Todo esto demostraba lo bien que lo había educado y lo humilde que era Harry pero como simplemente era una niño y no le gusta que su padre se tenga que ir horas y no pueda jugar con él, hacía lo posible para que sus niñeras explotaran y renunciaran.

La primera había sido una linda chica rubia de unos 20 años, era tierna con él y lo dejaba comer galletas antes de la cena pero él quería a su papá y ese era otro problema con la chica, coqueteaba con su papá y no le gustaba eso. Su papá era de él y de su mamá, así que no le gustaba que cuando llegaba su papá la chica se acomodaba la ropa para verse mejor, así que hizo lo que cualquier Potter haría y lo mejor que sabían hacer.

Pociones.

Su abuelo le enseñaba pequeñas pociones que hacían cosas inofensivas y él aprendía rápido, así que su abuelo no tardó en regalarle en navidad un pequeño kit de calderos y pequeñas porciones de ingredientes. Así que fue fácil hacer una poción que hacía que el pelo se cayera.

Y así la linda rubia huyó llamando a Harry "un niño mocoso."

Luego siguió una anciana señora de no más de 70 años que era todo lo contrario a su primera niñera. Era malvada, cruel y no lo dejaba comer galletas nunca. Así que no tardó ni un día en planear su plan llamado "desaparecer a la viejita" y empezó a actuar. Esta vez no usó pociones puesto que estas fueron confiscadas por su última creación, así que pidió a su mayor confidente, Ron Weasley. Habían convencido a su papá y a la señora Weasley que llevaran a Ron a su casa al cuidado de su niñera y después de muchos berrinches y lloriqueos lo lograron así que la primera parte de su plan estaba listo y ahora solo faltaba que Ron actuará.

Harían que Ron fingiera que estaba asustado por haber visto un animal peligroso y así la niñera fuera a ver. Ron la llevó al lugar que casualmente era un armario viejo y cuando la anciana entró al armario Harry cerró la puerta con un hechizo con la varita de aprendiz para niños que su papá le había comprado.

Ron le dijo que con solo encerrar a la niñera no bastaría para que renunciara pero Harry no miento cuando le dijo a Ron que dijera que había un animal en el armario, así que le preguntó a Ron si recordaba la rana venenosa que había atrapado cuando protegió a Ginny, a lo cual el pelirrojo asintió y él simplemente le susurró: