Adolescentes En Apuros

Cap 6 | ¡Por las bragas de la abuela!

Capítulo 6
¡Por las bragas de la abuela!

Bueno me gustaría decir que estás chicas van a afrontar las consecuencias de sus actos pero, no.

Vuelven a ver desde la ventana que el joven si éste ahí y afirmar que no están locas, pero el sigue ahí. La mamá de Bárbara atiende en el segundo golpe de la puerta.

Y la primera idea para salir de este lío es: salir por la misma ventana del cuarto.

Y con muchas sabanas atando rápido, logran escabullirse antes que llegue la madre de Bárbara buscándolas. Y solo para cubrir las travesuras de su hija y amigas, le dice al joven:

—Perdón, no me percaté y salieron hace un rato, no están — pero señala al muchacho y le dice en un tono muy sutil pero fulminante — creo que es lo poco que mereces, sal de aquí.

El joven no le queda de otra que salir del lugar y solo tiene un objetivo ahora, él mismo hablará con las chicas.

Mientras tanto ellas corren hasta la siguiente calle. Entre risas, y con los cabello húmedos porque al bajar de la ventana, activaron los rociadores del césped.

Pero para su mala suerte, ven el auto del rubio, con una chaqueta de cuero color negro y pantalones azules.

El ex de Brittany, a ella se le llena rápido la cabeza de ira. Bueno, a veces ella no piensa bien y piensa con los pies, en un momento de arranque quiso seguir al joven. Pero Isabella y Bárbara jalan de su suéter rosado y sus pants con estampado de Hello Kitty—que su mamá le regaló antes de irse a Inglaterra— en fin toman de ella y se esconden en los arbustos al ver que baja del auto frente a una casa, al estilo Victoriano. El joven toca el timbre de la casa de color blanco y café, sin antes ver a sus lados, acto seguido de inseguridad, lo cual crea incertidumbre en las chicas, la pelinegra, la rubia y la castaña ladean al mismo tiempo sus cabezas por lo sospechoso que se comporta el muchacho jugador de fútbol americano.

Cuando escuchan la puerta abrirse, esconden sus cabezas curiosas atentas entre los espacios de los arbustos, observan como sale una señora veterana y saluda a Marcus con una amplia sonrisa. Bárbara enchina los ojos y luego las dos chicas  la pelinegra y la castaña saltan por el chillido agudo que sale de la boca de la rubia.

—¡Por las bragas de mi abuela—grita e inmediatamente las chicas tapan su boca y ella tiene los ojos tan abiertos y atentos hacia la entrada de la casa.

—Cállate, no seas boba —regaña Isabella.

—¿Acaso Marcus sale con mujeres de la tercera edad? —inquiere Brittany frunciendo el ceño.

Isabella y Bárbara respoplan al mismo tiempo

—La verdad Brittany que tienes el cerebro algo vacío —replica Isabella —es obvio que no — y toma el rostro de la chica con mirada azulada dirigiendola a la vista de la ventana de la casa en el segundo piso.

—Por los bigotes de Albert Einstein—dicen todas al mismo tiempo chocando las cinco. Ahora en todo caso de que Marcus quiera abrir su bocota, tienen como callarla, la idea de Bárbara era tirarle un puñetazo o un ladrillo a la cara, peeeero esto está mejor.

Las tres se miran con  malicia entre los arbustos y saben exactamente qué hacer ahora.