La mañana llegó al igual que un silencio un poco incómodo, después de haber compartido una noche un tanto intrigante con mi esposo, ambos nos fuimos a dormir sin decir absolutamente nada, abrazados y cubiertos por nuestra gruesa manta.
Aún así mi sonrisa era notoria, pues como toda mañana esperaba ver a mi esposo e hijo desayunar mientras compartían una conversación a la qué me unía.
Era cálido y por supuesto reconfortante.
Pero esa mañana algo había cambiado, ninguno de los dos estaba, se sentía extraño, la mañana estaba más fría de lo normal, quizas por los cambios climáticos o porque así parecía para mí.
Camine a la cocina divisando a Hyori limpiando una encimera.
- Buen día Hyo ¿Dónde están mi esposo y Min?
La mujer se volteo e inmediatamente saludo con una reverencia.
- Buenos días señor Jeon, el joven Minsook se fue a clases y su esposo dijo que no desayunaria porque tenía una reunión temprano.
Algo no cuadraba, algo era extraño.
¿Minsook yendo temprano a clases?
Hyori noto mi cara desconcertada y decidió hablar una vez más.
- El señor tuvo una discusión con el joven Minsook.- Mis ojos se enfocaron en ella esperando más información.- Al parecer el señor no está de acuerdo con algo que el joven quiere...
La cita...
Rodé los ojos y suspiré con cansancio.
¿Siempre tenía que controlarlo todo?
Entendía perfectamente que quisiera proteger a Minsook era su único hijo, pero vamos ¿Tanto así? Minsook era un adolescente, era normal que quisiera conocer chicas o salir a fiestas como todo adolescente normal, ¿Que hay de malo con eso?
Le di las gracias a Hyori y me fui a la habitación para cambiar mi ropa, Jeon iba a escucharme.
Jeon Jungkook
Miraba a la mujer frente a mi, ya se le estaba haciendo costumbre visitarme en mi oficina aún que pudiera notar mi desagrado hacia ella.
Simplemente lo ignoraba como si no le importara.
- Entonces ¿Que hay de tu madre?- Preguntó encendiendo un cigarrillo mientras cruzaba sus piernas con sus aires de grandeza.
- No se nada de ella desde que mi padre arruinó nuestra familia.
Su risa irónica me hizo sentir aún más asqueado.
- Ella merecía a alguien mejor.- Dijo soltando el humo retenido con una sonrisa sádica.
- Ella merecía ver a su hijo crecer.- Respondí sin dudar.
Fue aquello lo que llamo su atención y volteo a verme con una ceja alzada.
- ¿Te arrepientes de mi?
- Porsupuesto.
Rió con burla dando otra calada a su asqueroso cigarrillo.
- No me importa, seguirás siendo mío hasta que me aburra de ti ¿Y que crees? Eso no pasará.
Tragué grueso y dirigí mi mirada a aquella foto en mi escritorio, aquella foto de mi familia.
Mi familia...
- No soy un objeto.
- Aún así, yo te compre.- Apagó su cigarrillo tirando la colilla al suelo.- Así que, no eras muy importante para tu padre después de todo.
ESTÁS LEYENDO
SR JEON #2 +21✓
HumorSegundo libro de: SR JEON Necesario leer la primera parte de esta historia - Contenido+21 - Mención al BDSM No sé aceptan copias ni adaptaciones.