Karma

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Hyung ven a buscarme, me quede sin dinero para volver a casa - apenas podía esconder su sonrisa al enviar el mensaje, junto con la ubicación donde se encontraba.

¿Quieres que te transfiera dinero o que vaya a buscarte? - No tenía sentido, intentar que Yesung entienda sus mensajes... Le había pedido claridad al momento de expresarse, por lo que decidió que sería más directo.

Se recostó con el torso desnudo en esa gran cama de dos plazas y extendió el teléfono a lo alto, donde enfoco una perfecta foto de su rostro junto con su pecho. Le hubiera encantado estar a su lado cuando reciba la foto.

Cuando la respuesta apareció no pudo evitar sonreír - " en 10 llego" - todas sus inseguridades en torno al mayor quedaron en el olvido.

Había comprado también la cena, esa noche planeaba quedarse ahí con la compañía del mayor. Tomo una ducha rápida y cuando su teléfono sonó creyó que tal vez el mayor ya había llegado hasta notar de quien era el siguiente mensaje "Zhoumi" leer ese nombre realmente no le alegraba en absoluto.

"Mi madre está muriendo Kyuhyun...Te necesito tanto... sé que no lo merezco... pero necesito sentir tu abrazo en este momento" sostuvo el teléfono en sus manos, no sabía qué demonios escribir.

Hacía tiempo tenía conocimiento de la enfermedad de su madre y sabía también lo pegado que era a ella, no debería sentir pena. Sin embargo, algo dentro suyo se movió... la maldita compasión.

"Mañana iré a verla" su respuesta sabia a compromiso, no quería alentar otros pensamientos, pero habían compartido tanto tiempo, que ahora sentía la obligación de aunque sea hacer acto de presencia un día.

"Te amo tanto que duele tenerte lejos"

*

El sonido de la puerta lo bajo de su nube de tristeza, dejo el teléfono abandonado en el sillón y casi corrió a la puerta ansioso, al abrir se encontró con esos ojos negros tan hermosos.

Esperaba encontrarte como en la foto - le dijo atrapando su cintura. Ni siquiera tenía que decirlo dos veces para que se saque la ropa delante del mayor.

Los besos comenzaron asfixiantes, podía sentir esas pequeñas y confiables manos repasar la piel de su torso, sus piernas chocaron con el apoya brazo del sillón y termino cayendo de espaldas y encima suyo el cuerpo del mayor.

Sintió como esas manos llevaban sus piernas a la cintura del mayor - Te amo Kyu... - le dijo cuándo sus besos bajaron desde sus labios a su mentón. Extasiado era poco, cuantas veces había soñado despierto con ese momento, sin embargo cuando lo sintió inmóvil y lo miro... noto que esos ojos estaban mirando sobre su cabeza.

Se acercó para intentar besarlo, pero Yesung se alejó - Hyung ¿Qué pasa? - pregunto, cuando el otro se levantó, sin embargo cuando vio el aparato en sus manos. Supo que todo podía mal interpretarse - No es lo que crees -

Esos ojos negros enfurecidos volvieron a él y giro el celular con el mensaje de Zhoumi, para luego arrojar el teléfono del menor sobre los almohadones - Déjame explicarte - intento agarrar su brazo pero Yesung lo soltó de una forma brusca - No me hagas esto... mira la conversación entera - le pidió recogiendo el teléfono e intentando acercárselo - Hyung por favor, su madre... -

Supongo que te hice esperar demasiado - esas palabras, no sonaban como el Yesung que amaba pero ¡Demonios! era un mal entendido - Envíale la ubicación... yo me voy –

¡No! Por favor... aunque sea déjame hablar – le pidió aferrado a la manga de la camisa.

¿Qué sentido tiene? No necesito esto en mi vida – lo miro interrogante ¿así se terminaba todo? Tan fácil – Kyuhyun ese sujeto te uso, te manipulo e incluso te golpeo y ¿se envían mensajes?... estas tan enfermo como el – esas palabras tan ciertas pero tan dolorosas se abrían paso en su pecho, destrozando todo... se acercó nuevamente dispuesto a rogar por otra oportunidad – Ni te gastes – lo empujo alejándolo – Me resulta asqueroso incluso intentar hablar contigo –

- Narcisista -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora