Prólogo

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"Acme-tropolis" el horrible lugar donde vivo.

Un pequeño planeta rocoso que según mi abuelo, antes era el paraíso de todo ser humano. Un lugar virgen, con muchos recursos, mucha flora y fauna. Era el único planeta que podría mantenerlos con vida.

Mi abuelo fue quien llegó primero a este planeta, su planeta natal "Tierra" había sido destruido, contaminado, explotado por ellos mismos. La sobre población que existía ahí era mucho más que la que hay hoy en día aquí.

Mi abuelo, era el CEO de A Compañy that Makes Everything, mejor conocida como ACME, propuso que todos los habitantes animados fueran enviados al planeta "WR-1949", convenciendo a la gente de que así la población podría disminuir.

Aun así eran muchos como para habitar un solo planeta, decidieron que solo gente famosa o necesaria subiría a aquella nave y así fue.

Cuando llego, se asombro de ver un lindo amanecer, enseguida amaron ese planeta con todo su cariño, lo cuidaría para que no suceda lo mismo que con la tierra.

Pero la empresa ACME tenía otros planes...

Tan solo basto 1 semana para que llegarán 3 naves gigantes, mucha gente rica vino ahí. Pero lo peor fue cuando sin siquiera preguntar, el jefe ordenó derribar tantos árboles como hubiera, extraer minerales desde el núcleo del planeta.

Todo paso muy rápido, mi abuelo al preguntar qué pasaba fue despedido, todos los años que trabajo para ellos fueron tirados al vacío. La ciudad crecía sin control, las personas eran muy descuidadas.

Entonces empezó todo.

Mi padre, para seguir los pasos de su padre creo una nueva organización secreta contra el gobierno, está se llamaba "Loo-n-s". El y muchas personas más protestaron para que Acme parará de minar, de utilizar sus inventos para el mal.

La campaña duro años, demasiados, pero los planes de acme nunca cesaron, empezó a controlar todo, absolutamente todo. Llamo oficialmente al planeta "acme-tropolis" siendo este ahora una Ciudad planeta.

El más trágico día para mí fue cuando en una batalla, cuando yo tenía 16 años, mi padre fue herido por un Lacer.

Si el Lacer hubiera sido de acme, yo hubiese liderado la siguiente generación. Pero quien disparó fue uno de sus aliados, no recuerdo su nombre, pero recuerdo como mi padre se retorcía de dolor mientras me rogaba no entrar al grupo de los rebeldes. Llore mucho ese dia.

¿Realmente pude hacer más que quedarme disparando a un par de robots? Si, pude hacerlo, y es lo que me duele todos los días.

Entonces así fue.

Nunca me uni a Loo-n-s, nunca lo haría.
Me dediqué a estudiar todo lo que pudiera para matar el tiempo, mi gran inteligencia era una de mis más grandes virtudes, ¿Que puedo decir? Soy un genio.

Hubieron cosas buenas y cosas malas, mi ex novia que me utilizo solamente para poder convertirse en la mano derecha del líder de acme. Muchas cosas...

Termine viviendo bajo tierra, es el único lugar donde las señales que te controlan el cerebro no llegan. Las alcantarillas no son tan malas cuando tienes tú propio espacio para ingeniar cosas. Pero siempre estás solo, y con el tiempo te acostumbras.

Mientras tanto, luego de la muerte de mi padre, Loo-n-s se separó. Algunos permanecieron luchando, otros se dieron por vencidos. Realmente ya no había esperanza, Acme se había vuelto demasiado poderoso.

No hasta aquel día en que apareció, Literalmente como un rayo de sol que ilumina la mañana llego...

Era un extraño meteorito que nos saco de nuestro eje, liberando una extraña radiación que les dio super poderes a una parte de los habitantes, todos ellos los utilizaron para por fin darle batalla a todas esas máquinas que nos vigilan diariamente. Todos tenían la misma meta.. Derrotar el dominio de máquinas.

Lamentablemente, los poderes solo fueron temporales. Poco a poco todos iban perdiendolos, volviendo así a la normalidad catastrófica.

Bueno, todos excepto algunos como yo. Mis poderes no se fueron a los tres días cómo a los demás, tampoco a la primera semana ni a la segunda, estudie mi nueva capacidad y me di cuenta que soy uno de los pocos que aún tienen súper poderes.

Pero es peligroso salir así, así que vivo bajo la sombra, ayudándome a mí mismo y consiguiendo los materiales necesarios para mis nuevos inventos y pócimas.

Mientras buscaba más líquido de Lantano, me escabullia hacia el basurero de chatarra. Esos robots y máquinas contenían ese extraño líquido azul brilloso, tan poderoso como para liberar muchos rayos sin siquiera recargar, era sorprendente como podrían dejarlos así como si nada.

Lo malo es que estos solo contienen una pequeña gota cada uno, y yo necesito un frasco completo. Es muy difícil conseguir una buena cantidad aquí.

Mientras recolectaba, una increíble velocidad me arrebató el frasco semi-lleno. Voltee a ver en dirección a donde el viento iba... Entonces te vi.

Una sombra roja que corría muy rapido, me habías robado todo en lo que he estado trabajando. Entonces me enojé.

Te grite —¡¿Que demonios!?— pero nisiquiera volteaste a verme. Mientras te alejabas prendí mi mochila propulsora, talvez no es tan rápida como tú, pero almenos logré atraparte con mis poderes.  Usando varillas de metal te encerré en ellas.

Cuando notaste esto te asustaste, note tu cara de miedo y confusión. Mientras que yo estaba enojado contigo por haberme robado mis cosas.

—¿Quién eres?— te pregunté furioso.

No hubo respuesta de tu parte, esto me enojó más. Te tiré contra el suelo, entonces soltaste así el frasco que me peretenece. Te veías lastimado, yo me acerqué a tomar el frasco y alejarlo de ti.

Tan solo tuviste la oportunidad de escapar lo hiciste, no sin antes darme una mirada que reflejaba miedo. Corriste aún más rápido que la primera vez...

Loo-n-s| Loonatics AuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora