lonely hearts | HanaKisa

05

— Nos vemos en un rato.- Hanma salio del consultorio mientras desabrochaba su uniforme de intendente, para irse a cambiar por su outfit de casanova.

Kisaki sin saber que hacer, aún sonrojado hasta las orejas, se sentó frente a su pequeño escritorio respirando lentamente.
Su corazón latiendo a mil por hora le indicaba que algo estaba mal... ¿Tal vez le daría un infarto?¿Presión arterial alta?, ningúna de estás y más razones que pasaban por su cabeza tenían una pisca de sentido.
Tapo su rostro con ambas manos tallando su rostro y pasando sus dedos por el inicio de su rubia cabellera para después soltar un suspiro.
— Es la primera vez que siento tanto una emoción, bueno. Después de eso...- Comenzó a quitarse su vestimenta de trabajo, pensando en como haría para vivir con ese hombre cerca de el.

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Sin más, Hanma fue el primero en llegar a la vivienda, y su plan ya estaba formulado.
"Te besé para sacarte de esa situación incómoda, pero igualmente me disculpo, haré lo que sea para que me perdones" Aunque, no estaba seguro, esa línea solo le ah funcionado con chicas..., el único hombre con que estuvo no le daba importancia, solo se acostaba con el y le daba dinero, pero claro, su relación fue clara desde el inicio, solo por conveniencia mutua.
Con kisaki era igualmente de conveniencia, pero si este lo hecha de una vez , tan solo de haber pasado un día viviendo con el, no le era conveniente.

Mientras pensaba, el rubio llegó al lugar, en silencio, ni si quiera le saludo o volteo a ver y se fue directo al baño, para después escuchar el sonido de la ducha siendo usada.

— ¿Kisaki? - Hanma toco la puerta del baño un poco fuerte para llamar la atención del joven.
— ¿No me vas a responder? Mmmm, perdón por lo que pasó, solo quería sacarte de esa situación, ¿Estás bien? - No obtuvo respuesta, y su única opción fue esperar a que saliera, la cuál tardo casi 40 minutos en hacer.

Una vez salió el rubio del baño, aún con el cabello mojado, se paró frente al largucho delgado sin decir absolutamente nada, esperando por lo que tanto le quería hablar.

— Ehh... Ajá, quería sacarte de esa situación con ese tipo raro.- Rasco su nuca nervioso por la mirada directa de Tetta.
— ¿Solo eso? Bueno, gracias. - puso su toalla en su cabello humano para irlo secando mientras caminaba a su habitación.
— Vaya, que frío. - Hanma lo siguio con su mirada hasta que entró a su habitación y cerró la puerta repentinamente.

Pensándolo bien, ¿En serio ese tipo era el ex de Kisaki? Comparándolo con el, Hanma era mil veces más atractivo que ese tipo...
Ese pensamiento encendió un foco en la cabeza del alto, algo para aflojar un poco la tensión que había creado sin querer.

— Kisaki ¿Puedo entrar? Quiero preguntarte una cosa.- toco la puerta suavemente.
— ¿Acaso me estás acosando? - Kisaki sonaba algo molesto.
— ¡Para nada! Solo déjame preguntarte esto y te dejare en paz.
— Adelante entonces.- Hanma abrió la puerta y vio a kisaki con su pijama oscuro sentado en la cama brazos cruzados. — ¿Y bien? ¿Que quieres?
Hanma de acercó y sentó al lado del joven con una sonrisa amable en su rostro, observo la mirada del otro, notando que se había puesto nervioso con solo acercarse. — Ese tipo del consultorio, ¿Era tu novio? - Soltó sin más.
— mmm... Si, algo así.- Dijo lo más cortante que pudo.
— osea, ¿Que ya no son nada?- se le acercó al otro.
Desviando con la cabeza, Kisaki movió su rostro en negación sintiendo como la respiración del alto se acercaba a  su oído.
— Bien, entonces.... ¿Que te parece si hacemos un acuerdo?
— ¿De que t-trata...? - Paso saliva.
— Siempre que estes en alguna situación así, con ese tipo o cualquiera que te moleste, yo te puedo ayudar de cierta manera. - Puso su mano suavemente en el cuello pálido de Kisaki, dando pequeñas caricias, haciendo que la atmósfera se tornará "Color de rosa"

Sin negarse, Kisaki no podía seguir, sentía que su corazón saldría volando en cualquier segundo, su cabeza era un garabato, sin forma ni orden.
— ¿Puedo pagarte de cualquier manera?
— Ajá.
Sus miradas se sentían conectadas por un hilo de tensión, ninguno podía apartar la mirada del otro, Kisaki era el más nervioso, Hanma podía sentir su corazón, cuerpo y respiración temblaron.
Así, Kisaki se abalanzó sobre los labios de Hanma, de una manera poco gentil y desesperada, agitado de manera intensa mientras Habla trataba de seguirle el paso.
Nadie había Sido así de rudo con el.

Sin darse cuenta, el de lentes ya estaba sobre el, cortándole la respiración mientras lo tomaba del cuello y apretaba no tan "fuerte" como para matarlo pero si para dejarle marcas.

Hanma no sabía en la situación que se había metido con alguien vulnerable mentalmente.

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Ya era otro día, estaba solo en la habitación de Kisaki, solo con su pantalón puesto, sin recordar nada de lo pasado, más que lo anteriormente narrado. Aturdido, se levantó y dirigió a la cocina para beber agua y aclarar sus pensamientos.

Tomo la jarra de cristal que estaba dentro del refrigerador y tomo directamente de ella, dejándola vacía. Cerró la puerta del refrigerador y noto una nota pegada con un imán de banana.
"Hoy tendré turno doble, entró temprano, tal vez nos veamos en el trabajo."

— Loco, me dejas inconsciente y me tiras como si nada.

Irónicamente el hacia eso mismo con las mujeres de su pueblo, con la diferencia de que Kisaki no le había robado los pocos centavos que le quedaban.

Sin más, se dió un baño y puso su uniforme de intendente para su trabajó totalmente honesto.

Por otro lado, Kisaki no paraba de pensar en el aroma y sabor de Hanma,  desde que el largucho quedó inconsciente, no paro de "saborear" completamente la integridad de este, no durmió nada más que una hora, dejandolo aún abrumado, incluso en el trabajo.
Tres tazas de café no libraban su mente, "Mediquenme, me dio Hanma"

— Bueno, tal vez me encuentre con el...no, jajaja ¡vivo con él! - sobó su mejilla sonrojada y suspiro.

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Tendré que dibujar la portada de esto 🫂