Era una fría noche de invierno, la nieve cubría el suelo de los bosques y el aire silbaba con fuerza entre las ramas de los árboles.
El sonido de las voces de los hombres se hacían eco en el pecho de la mujer que corría sin aliento hacia la más profunda oscuridad, donde encontraría refugio de aquellos que querían su cabeza en una pica.
Brenda, había vagado por todas las tierras de aquel inhóspito reino, desde las suaves arenas de las costas, los verdes valles, los klanes que bañaban desde el este hasta allí donde el sol desaparecía para continuar hasta el más frío y cruel norte. Y es ahí. A mitad de camino donde la suerte la abandonó, topándose con un grupo de cristianos, quiénes la consideraban obra del demonio y por ello debía arder viva.
Pero esa noche no.
Corrió tanto como sus pequeñas y fuertes piernas le permitieron para poder llegar al fin, al frondoso bosque que sabía que hacía de frontera con uno de los klanes del norte más conocidos por la fiereza de sus guerreros, por ello tenía la esperanza de que una vez interna en el bosque, se olvidasen de ella y la dieran por muerta.
-¿Qué le pasó a la bruja papá? ¿La atraparon los cristianos? – Soren miró a su hija con nostalgia y a la vez con orgullo.
-Para saber la respuesta a tus preguntas, deberás esperar a mañana señorita.
-Pero...
-Hela, es hora de dormir. Mañana nos espera un largo día. – con un dulce gesto de amor, Soren aparta el rebelde mechón de pelo de la frente de su hija, para darle un beso en ella y arroparla. – Te quiero mi pequeña guerrera.
-Tequiero papá.
ESTÁS LEYENDO
La bruja que no temía al lobo
RomanceDälur, reino del norte, hogar de los vientos fríos, las noches heladas, los veranos frescos, las praderas verdes y los bosques fértiles. Hogar de una niña que creció bajo la protección de un ser que le concedió aquello por lo que otros la temen. Hog...