Capítulo 7

7 3 0
                                    

Las palabras de la pelirroja, la cual apuntaba el cuerpo sin vida en el sofá, me dolieron

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Las palabras de la pelirroja, la cual apuntaba el cuerpo sin vida en el sofá, me dolieron. Se que perdió a alguien que amaba. Estaba tan desesperada ¿Por qué? Quería tener sexo con un imbécil, que mataba a personas inocentes, a las mujeres las violaba y luego mataba.

Ella debería de saber eso, es terca, no aceptaría mis palabras con tanta facilidad, seguiría negando el error de haber salido corriendo tras ese tipo.

Solo quería mantenerla a salvo de cualquier peligro que se presentara delante de ella, hice demasiado mal dejar que ella me convenciera que la tocara, estuvo mal, fui demasiado lejos, sobrepasando la línea que nos mantiene lejos de ambos.

Intento ser razonable con ella, pero llevo tanto tiempo conociéndola, sabiendo que no me hará caso en nada, intento que no salga lastimada si alguna vez puede encontrar a su persona especial.

Temía por su vida como si fuera mi familia, no pertenecía a sus raíces tampoco su apellido me pertenecía, pero yo... yo daría mi vida por las Athanasious, porque para eso fui entrenado, sabía a la perfección lo que me pasaría si en algún momento de mi vida, mafias mucho más grandes que el de Artemisa Athanasiou, atacaba, seríamos un cartel de drogas más en este mundo de pesadilla.

No intentaba ser sobreproctetor con Venus, quería que ella estuviera bien.

Los seres humanos no somos inmortales, tenemos un limite, nuestra alarma hace sonar aquel sonido que lastima nuestra audición, nos hace despertar de un sueño, hecho fuera de nuestra realidad, cada día, los humanos nos arriesgamos a que nuestro tiempo se acabe por cualquier accidente o muerte natural.

Aunque sean jóvenes, no quita que pase lo peor.

Somos parte de algo que jamás cambiaría, porque el final de la raza humana acabara, uno a uno va a desaparecer. Yo adelanto mi muerte, no soporto querer sobrevivir hasta el final de los tiempo, porque se que siempre nos volveremos polvo.

Las personas no esperan su muerte, esperan ser felices con alguien que de verdad les ame. Pero hay otras que desean no seguir vivos.

Los abusos de menores y golpes en casa, aumentan en cada momento, eso a los adolescentes les hace querer desvanecerse, queriendo dejar de sufrir aquellos abusos que padres o personas cercanas, les proporcionan.

Jamás, nuestra humanidad será sana.

Nosotros acabaríamos con nuestra vida de una o de alguna forma, que nos haga sentir libres. Que podamos ser felices.

Lo que nos hace felices, somos nosotros.

Solo que hay algunos que dependen de personas hipócritas, terminan de hundirse aún más, acabarían más rotos que antes.

Tu podrías hacerme pecarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora