𝟎𝟏𝟐

379 38 0
                                    



012. Esto es todo una mierda

En una cosa tenía razón rosalind, las cosas habían cambiado en alfea, para mal más que nada.

¿Aquello de ir lento con los poderes?, a la basura, se encontraban en el círculo de piedra y en vez de tratar de conectar con sus poderes y llamar a la tierra, luchaban.

—Estoy harta de esta mierda— murmuro al ver como Bloom perdía apropósito contra un hada de aire.

—Si estás tan harta, ¿por qué no pasas tú adelante?— llamo la nueva directora, si Rosalind era la nueva directora, pero no era ni la mitad de lo que era Dowling.

—Haré lo de siempre— se levantó con mala actitud, está dispuesta a demostrarle cada vez que podía que la odiaba.

Le toco contra un hada de agua a lo que en segundos termino en papada y como la perdedora, casi no usaba sus poderes, se negaba a dejarse manipular por aquella mujer, a darle lo que quería.

—Sé que no estás feliz con esto, nadie lo está, pero no puedes terminar cada pelea herida o empapada— murmuro Stella dándole su abrigo mientras ambas veían como Sia luchaba, el hada de tecnología había logrado aprender algo sobre los poderes de aire y ahora usaba electricidad, pero lo había hecho sola cosa que a rosalind tampoco le fascinaba, puesto que no podía decir que lo había causado ella.

—Esto es una mierda.











(...)





—Eres una más del resto— reclamo Rosalind cuando Bloom y Astra fueron llamadas a su oficina— y tú ni se diga estas todavia peor.

—Por lo menos no soy la peor, ¿no?— reto la rubia.

—Sois tan poderosas y lo estáis desperdiciando.

—Cuando dowling estaba nos iba bien.

—Leales como un perro— bufo la mujer— Farah huyo, y vosotras estáis escogiendo el bando equivocado.

—La están buscando.

—Han cancelado la búsqueda, era un desperdicio de recursos— informo la mujer.

—¿Y eso a usted le da igual?— se molestó Bloom

La mujer tomó asiento en la silla que era de Dowling— me importa una mierda— contesto— ella y saul me han dejado una escuela de críos poco preparados para las amenazas para las que nos enfrentamos.

—¿qué amenazas?, no habéis visto un quemado desde que los vencimos.

—Habéis crecido en el primer mundo, no tenéis ni idea de qué clase de pesadillas existen aquí, pero yo sí y mi trabajo es prepararos para luchar, un trabajo para el que Farah y Saúl no estaban cualificados, el antiguo régimen cayó, debéis adaptaros.





(...)


—La odio, la detestó por dios— gruñó molesta Astra.

—Alguien morirá por su culpa, ¿soy yo o las últimas semanas ha estado más cruel?

Sia no pudo evitar reír ligeramente cuando aisha insinuó que seguramente sería por el nuevo corte de pelo de la mujer.

𝐀𝐬𝐭𝐫𝐚 ── Fate: The winx sagaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora