˗ˏˋAdaptaciónˎˊ˗
❝Dónde está Jimin siempre hay un desastre que Taehyung tiene que arreglar❞
- Nunca pensé que explotaría la gaseosa.
- Tranquilo, Minnie. Yo lo arreglo.
➛ Vmin
➛ Omegaverse
➛ Esta historia le pertenece en su totalidad a su autor o au...
— Permiso, necesito pasar, permiso. — pedía un Omega de quince años mientras corría por los pasillos de la escuela.
— ¡Oye, idiota!
— Lo siento, perdóname. — hablaba ya agitado.
El beta hizo una mueca viendo cómo el Omega seguía corriendo, chocando con varias personas — Park a pesar de ser de nuevo ingreso ya se ha hecho notar.
— Por su gran suerte. — habló con sarcasmo.
Por otro lado un rubio casi se aventó hacia las escaleras, necesitaba un supresor con urgencia pero alguien se metió en su camino.
— ¡Cuidado! — gritó tratando de esquivar a cierto pelinegro pero al parecer era un sordo.
— ¡Oye!
Sin poder evitar, ambos cayeron por las escaleras, se escucharon quejidos por parte de ambos pero más de uno que de otro.
— ¡Ay, Omega idiota! ¡Quítate, me duele el brazo! — exclamó con odio el adolescente.
Jimin ayudo al Alfa a sentarse en el suelo, en me la de unos minutos ya habían espectadores.
— ¡Mierda, Kim! ¡Se te ha roto el brazo! — gritó con pánico su acompañante.
El rubio casi llora al ver el brazo del Alfa — No era mi intención, te lo juro.
— ¡Aléjate, idiota! ¡No me toques! — aventó lejos de él al rubio — ¡Y tú! ¡No está roto se ha dislocado!
Una horas después Taehyung yacía con un cabestrillo, mirado fijamente al Omega culpable de que se encuentre ahí descansando en su muslo. Movio ligeramente al rubio tratando de que despertara.
"Él es el culpable de que yo esté aquí, no debo ser delicado"
Aventó la cabeza del Omega sin usar tanta fuerza, según él, pero al parecer había usado mucha ya que vió al Omega caer.
— ¡Estoy bien! — exclamó el rubio.
— No grites y mejor vete, suficiente tengo con esta aquí gracias a ti.
Jimin hizo un mohín — Yo realmente lo siento, no quería lastimarte... ¿Puedes perdonarme?
— Vete, no quiero tus disculpas.
El Omega realmente se sintió mal al escuchar eso y más porque su lobo se sentía ansioso, quería mimos del pelinegro.
— Uh, mis papás ya pagaron la cuenta del hospital y todo lo necesario. — habló con timidez.
— Es lo mínimo que debías hacer, ahora vete.
El rubio asintió tomando su mochila — Yo realmente lo siento — hizo una leve reverencia antes de salir de la habitación.
Taehyung ignoró los aullidos de su lobo, se negaba a aceptar que ya había encontrado predestinado. Era muy joven para tener un predestinado.
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