¹‎𓇼‧₊˚𝐏𝐎𝐒𝐄𝐈𝐃𝐎𝐍'𝐒 𝐂𝐔𝐑𝐒𝐄 ~ Trials Of Apollo 🔆

💙 𝐟𝐢𝐯𝐞; my (Nina's) list of priorities

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capítulo cinco

mi (de Nina) lista de prioridades

 𓈒ㅤׂㅤ𐙚 ࣪ ⭒🌊𓇼

       Cuando todo terminó cerré los ojos un momento, tomé aire y traté de ignorar el frío que seguía molestando. A veces, mis poderes son un desafío para mí misma ya que solían pasar momentos en los que no responden de la forma en la que me gustaría. Por ejemplo, había hecho el esfuerzo para no mojar al falso Apolo y para no mojarme, pero eso no me había funcionado tiempo atrás cuando el idiota del auto ni siquiera tocó bocina para avisarme que iba a pasar a un lado mio.

El nerd aún estaba en el suelo cuando me giré en su dirección, me observaba como si estuviera evaluándome. Supuse que sería algo común, no nos conocíamos de nada y de parecer una joven indefensa terminé armando una catástrofe de agua sucia y basura para ayudarlo. Además, no estaba en mis mejores galas. Pero así como escudriñaba su vista en mi yo lo hacía con él, tenía una pinta muy desastrosa con todos los restos de café y fruta podrida que tenía encima. Cejas pobladas, tenía ojos celestes tan claros que podía confundirlos con el cielo azul en un día de sol, incluso su estructura ósea era bonita, tenía la mandíbula marcada y un cuello estilizado pero con la nariz rota, la pinta de vagabundo junto al acné acababa toda la magia, no se veía como un ser divino.

Mientras me acercaba podía sentir como se ponía cada vez más nervioso y, ¿se estaba sonrojando?

─Gracias─ dijo con la voz rara producto a las heridas de su rostro, su nariz no dejaba de sangrar en un fino hilo

Estiré mi mano primero para tomar mi bolsa de compras y luego la otra en su dirección para ayudarlo a levantarse e hizo el esfuerzo poco a poco. Frente a frente se notaba mucho más alto, apenas y le llegaba al hombro. Tenías más pinta de adolescente que otra cosa, pensé que era un veinteañero pero ahora viendo su contextura podía apostar que no tenía más de dieciséis o diecisiete años.

─No hace falta que las des─ respondí─. Si quieres la verdad, iba a dejarte a tu suerte.

─¿Pero...?

Pero se me cruzaron en el camino y no quería que aplastaran los tomates que conseguí en oferta, quise decir. Tenía muchas preguntas que quería hacerle, sobre ser un dios (supuestamente) sobre la relación con mi padrastro pero supuse que había una más importante.

─¿Realmente eres el dios Apolo?

La curiosidad me ganó, lo noté en mi tono de voz y en cómo él alzó las cejas mirándome con renovada atención. Quizá para él era curioso que no parezca asombrada ante la mención de los dioses en Manhattan.

─¿Por eso decidiste intervenir? Un poco tarde, de igual forma, me he llevado un doloroso primer encuentro.

─Sip─ remarqué la P al final─, por eso mismo. Y escucha, yo tenía la intención de que nos vayamos sin pelear pero tú decidiste que debías de dar el primer paso, solamente te dejé ser. No es como si fuera tu compinche o algo, aprende de tus lecciones, súper mortal.

Revisé mis compras, todo en orden y con eso le di una mirada, él seguía observándome como si fuera una extraña, que lo era, pero peor, como si estar cerca mío le diera escalofríos. Me sentí ligeramente ofendida.

─Debo decir que tengo mis dudas contigo─ seguí diciendo─, luces demasiado normal, ¿por qué un dios se pondría a sí mismo granos en la cara? No te pareces para nada a una divinidad.