Abro los ojos cuando escucho las primeras gotas caer. Va a llover.
Pongo mis brazos en cruz sobre la almohada y apoyo con delicadeza la cabeza encima, de tal manera para poder ver a través de la ventana de mi habitación.
Llueve. Caen lágrimas del cielo. Observo las nubes grises, las gotas caer... Escucho con paciencia el ruido que provocan las gotas al precipitarse contra el cristal de mi ventana. Es un ruido agradable, me hace sentir en paz y en sintonía con el mundo. Contemplo la belleza de la lluvia con mis ojos color miel y conecto con ella.
Esta noche no me apetece dormir, quiero quedarme observando la lluvia. Quiero quedarme, quiero quedarme hasta que deje de llover y aparezca ante mí un bonito cielo estrellado.
Quiero quedarme a ver el amanecer, quiero ver el Sol saliendo por el horizonte. Quiero presenciar como los primeros rayos de Sol impregnan de luz y color todo lo que se encuentran a su paso. Quiero quedarme hasta ver esa esperanza salir por el horizonte e iluminarlo todo con su luz cálida.
Quiero ver todo eso, porque quiero comprobar por mí misma, si es verdad que al estar todo mojado, todo brilla más que nunca.
ESTÁS LEYENDO
Caen lágrimas del cielo
PoetryCuando estás atrapado en un pozo tan profundo, no puedes ver nada, todo está muy oscuro, tanto que la única cosa que puedes apreciar al levantar la mirada es la luz de un cielo despejado.