Miro por la ventana del auto de mis padres y solo puedo preguntarme una cosa ¿Por qué no tengo una vida normal?. No pido tener novio, una mejor amiga, ir a cine los sábados, comer helado los domingos, o comer con mis padres en una mesa familiar todos las noches. Simplemente quiero saber lo que se siente estar conforme con tu cuerpo, pensar como alguien normal.
Aún así en mi mundo yo soy normal, mi mente es común y corriente, mi forma de ver las personas es agradable y mi actitud es más amable de lo que yo quisiera demostrar. Pero al momento de mirar el cielo y perderme en ese mundo de fantasía en el que siempre pienso, es cuando me doy cuenta de que en el real, yo soy la rara, soy la típica chica con problemas mentales, las personas a mi al rededor me hacen sentir diferente, rara, fea, etc... Total, una lágrima baja de mi ojo deslizándose por todo mi rostro hasta caer en mi pierna; después de tener una discusión con mis padres, después de haber tratado de convencerlos de que puedo intentar cambiar y de que no seré mentirosa, mis intentos fueron realmente fallidos, Ahora voy mirando por la ventana las lindas y verdes hojas de los árboles, la hermosa perspectiva que alcanzo a ver de la calle, con un cigarrillo que me hace perderme aún más en mi mente, contemplando por última vez lo bonito que es estar fuera de ese estúpido centro de rehabilitación al que me dirijo. Sólo hay una cosa que alza mi ánimo de nuevo, y es que la jodida señora Lucy dijo que estoy a tiempo para poder rehabilitarme. Eso me hace pensar que probablemente esté poco tiempo allá.
Veo de lo lejos el gran nombre de la clínica que está por en frente de ella. "NervousHouse". Estuve allí una vez, creo que tenía 13 años. Pero sólo fue una simple visita.
Se detiene el auto en el estacionamiento y bajamos todos.
-¿Qué hay del instituto? -Pregunto a mis padres con una cara de disgusto.
-Hablamos con Lucy, ella te enviará todo por Internet, de vez en cuando te presentarás para algunos exámenes, no te preocupes. -Responde mamá. Seguramente está muy contenta de haberse quitado un peso de encima.
Entramos y en la recepción hay una joven chica de lentes y coleta de caballo.
-Buenas tardes, somos la familia Summer. -Dice mi padre a la mujer.
-Oh, los hemos estado esperando, tú debes ser Cassie. -Nos dice con una sonrisa aparentemente hipócrita. -Pasen por aquí, por favor.
Nos lleva a una especie de jardín. Es una de las cosas más hermosas que he visto nunca. Hay árboles y flores por todas partes, bancas y bastantes adolescentes con problemas. Es bonito y a la vez me da miedo.
-Aquí es donde nuestros pacientes socializan y pueden tomar aire fresco, es donde pasan la mayor parte del día, hasta las 5:00 PM. -Explica la señorita y mis padres parecen despreocupados.
Seguimos por el pasillo y ella nos indica las oficinas y las emergencias.
-Ahora sigamos al quinto piso que es donde está tu habitación, Cassie. -Dice la señorita tratando se ser amable.
Entro al ascensor junto con ellos, es grande y tiene paredes de espejos.
Al llegar al quinto piso es algo tenebroso, ya puedo imaginarlo en la noche. Nos acercamos a una de las habitaciones que supongo que es la mía. "5H" Dice en la puerta.
-Aquí es, Cassie comparte su habitación con una chica llamada Rose. -Dice la señorita. -Puede que se la lleven muy bien.
Esa última frase. "Puede" Así que es posible que no me la lleve bien con esa chica. Genial, ya me la imagino, malhumorada, y me ha de odiar.
Entramos y es algo grande, hay dos camas y dos armarios. Me alegra no tener que juntar mis cosas con las de la tal Rose.
-Aquí es. -Nos sonríe la señorita. -Pueden despedirse de ella. Los espero en la recepción.

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Cassie
Teen Fiction------Mente de típica chica con trastornos alimenticios y problemas psicológicos------- Anorexia, bulimia, trastorno por atracción, comer, no comer, es lo correcto, no lo es. Todos los días me pregunto ¿Qué se sentirá estar conforme con tu cuerpo?. ...